En Ruta por la Rioja Alavesa (I): De Laguardia al Complejo Eremita de Faido
Laguardia, Rioja Alavesa
Bodega Subterránea, Rioja Alta
Bodegas Marqués de Riscal, Elciego
Necrópolis y Ermita de Santa Maria de la Piscina, Salvador de la
Sonsierra
Castillo de Portilla, Alava
Ermita Nuestra Señora de la Peña, Faido
Rioja Alavesa, con más de 300 bodegas, es un territorio cuya seña de identidad
es la cultura del vino. Sin embargo, no es lo único de lo que podemos
disfrutar en esta comarca. Su rico patrimonio natural con la sierra Toloño, el
Río Ebro, las lagunas de Laguardia, o su patrimonio histórico, artístico y
arqueológico son algunas de las posibilidades que ofrece Rioja Alavesa.
Rioja Alavesa es una pequeña comarca que tiene una gran historia, avalada al
menos con tres tipos de evidencias que reflejan cómo ocuparon el terreno sus
primeros pobladores: los dólmenes prehistóricos, los castros de la Edad de
Hierro y las necrópolis altomedievales.
Solo es cuestión de planificar y combinar las opciones que mejor se adapten a
nosotros. En este plan os proponemos descubrir el lado más histórico y
aventurero de Rioja Alavesa.
El plan nos llevará a conocer la historia más antigua de esta comarca. Rioja
Alavesa es rica en vestigios prehistóricos. Un total de ocho dólmenes a
los pies de la flamante Sierra de Toloño hacen una ruta, ideal para realizar
en coche.
Son grandes y espectaculares. Cuidados y accesibles, harán descubrir al
visitante la magia que esconden. Los Llanos en Kripan, La Chabola de la
Hechicera, El Encinal, en Elvillar/Bilar, El Alto de La Huesera, San Martín,
El Sotillo y Layaza en Laguardia y Montecillo, localizado en Villabuena de
Álava conforman este rico patrimonio.
Tras la visita arqueológica, es hora de parar a comer. Cualquiera de las
localidades del camino será una buena opción.
1. Como llegar a Laguardia, Origen de nuestra Ruta
Ubicación de Laguardia
Laguardia se encuentra a tan solo 20 kilómetros de Logroño, otro de los grandes núcleos urbano de la zona.
Tambien
Laguardia está ubicada a 50 kilómetros de Vitoria Gasteiz, capital de
Alava y una de las ciudades vascas con mayor calidad de vida.
Rodeada de viñedos y espacios naturales impresionantes, nos
proporciona un espacio rural idóneo para desconectar del estrés de las
grandes urbes.
Laguardia se encuentra en el corazón de la Rioja
Alavesa, una tierra delimitada por 2 grandes recursos naturales como la
Sierra de Cantabria y el rio Ebro.
La estación de tren más cercana es la de de Logroño.
Por
carretera
La autopista AP-68 es una de las autopistas más
importantes a nivel nacional, ya que une la N-I, a la altura de Miranda de
Ebro, con Zaragoza. También se puede llegar hasta Logroño desde Pamplona por
la autopista AP-12, y de allí a las diferentes localidades de Rioja Alavesa.
Desde Madrid hay una distancia de 356 km que se cubren en unas 3 horas y
cuarto.
Tomando como referencia Laguardia, capital de la comarca, la distancia hasta
Vitoria es de 48 km, que se tardan en recorrer unos 50 minutos. Desde
Bilbao, a 111 km, se tarda 1 hora y 20 minutos. Desde Pamplona hay 101km y
se tarda una hora y cuarto aproximadamente. Y desde Zaragoza hay 194 km y se
emplean cerca de dos horas en llegar.
Por avión
El
aeropuerto de Logroño-Argoncillo se encuentra a unos pocos kilómetros del
límite de la comarca, y a tan sólo 32,7 km de Laguardia, por la carretera
N232a. El aeropuerto conecta la zona con algunas de las principales ciudades
españolas. También se puede llegar por avión a los aeropuertos de Vitoria y
Bilbao.
www.aena.com
En tren
Esta zona está comunicada por vía férrea hasta la estación de Logroño, a 19
km de Laguardia.
www.renfe.es
imprescindible en nuestra ruta es la
2. Visita a Bodegas
Recomendamos disfrutar de los distintos tipos de bodegas con los que
contamos en la Rioja Alavesa (pequeñas, multinacionales,
familiares…).
Nos encontramos ante el dolmen más conocido de la zona, y no es por menos.
Enmarcado por campos de viñas y con la sierra de Toloño como telón de fondo,
La Chabola de la Hechicera es, sin lugar a dudas, el más espectacular de todos
los que hayamos visto.
La cámara principal, de forma poligonal, esta formada por nueve ortostatos en
los que se apoya la gran losa que hace la función de cubierta. En dirección
sureste parte el corredor compuesto por cinco losas. Rodeando al dolmen se ha
vuelvo a reconstruir recientemente el túmulo, acercándolo más a su aspecto
original.
Vista aérea del dolmen La Chabola de la Hechicera.
Durante los trabajos de recuperación se encontraron un total de 39 sepulturas,
junto a puntas de flecha, adornos y cerámicas. Su construcción data de finales
del Neolítico (5.000 años a.C.) y estuvo en uso unos 2.000 años, hasta la Edad
de Bronce.
Cuenta la leyenda que aquí moraba una bruja, y durante las mañanas de San Juán
cantaba y pregonaba insensateces.
Dolmen del Alto de la Huesera
Seguimos nuestra ruta de los dólmenes con un buen ejemplo de construcción de
tipo corredor, en donde todavía se conservan algunas losas de su
revestimiento.
La gran losa de cubierta principal que se cayó dentro en la antigüedad, ha
sido retornada a su localización original.
Un buen ejemplo de sepultura colectiva. En Alto de Huesera se localizaron un
total de 130 enterramientos de diferentes sexos y edades, así como
herramientas de sílex, fragmentos de cerámica y elementos decorativos. Su
utilización se alargó unos 2.000 años de forma intermitente, hasta el inicio
de la Edad de Bronce.
El yacimiento también conserva dos grandes lagrares rupestres de la Edad
Media. Éstos eran usados para pisar la uva y obtener así el mosto.
Lagares rupestres en el Alto de la Huesera.
Poblado de la Hoya
Poblado de la Hoya, Rioja Alavesa
una joya de nuestra historia.
Conoce el Poblado de La Hoya, un pequeño e interesante yacimiento arqueológico
a apenas 5 minutos de Laguardia.
El Poblado de La Hoya, fue entre el 1200 a.C y el 250 a.C el núcleo urbano
de mayor pujanza social y económica del espacio que hoy en día conocemos
como la Rioja Alavesa.
Un poblado, que, estructurado perfectamente con calles y plazas, acogía a más
habitantes que ningún otro.
Hoy en día, el centro de interpretación de La Hoya, más conocido como el Museo
de La Hoya o simplemente Poblado de La Hoya, nos explica la forma de vida de
aquella época.
Poblado de la Hoya, Rioja Alavesa
Su ubicación, entre viñedos, en un paraje de película, protegido por la
Sierra de Cantabria y con Laguardia como telón de fondo, es otro de sus
encantos. Maravilloso.
Y es que, gracias al yacimiento arqueológico excavado en los últimos años del
siglo XX, hoy en día es posible conocer detalles tan asombrosos como la
arquitectura de las casas que se encontraban en este poblado o las tradiciones
funerarias de aquella civilización.
Información del Poblado de La Hoya.
Precio: 0€, gratis.
Teléfono: 945 621 122
Horario: En invierno, de martes a sábado de 11:00 a 15:00 y domingos /
festivos de 11:00 a 14:00. En verano, de martes a sábado de 11:00 a 14:00 y de
16:00 a 19:00 y domingos/festivos de 11:00 a 14:00.
Ubicación: La Hoya Bidea, 13, Laguardia, Alava
4. Elciego
Elciego, Rioja Alavesa
El ciego se sitúa al sur de la Rioja Alavesa, en el territorio
histórico de Álava. Hacia el Norte, divisaremos la Sierra de Toloño, y al
Sur, veremos pasar el río Ebro.
Al Este, limita con Lapuebla de Labarca y al Oeste, con Baños de Ebro.
Al igual que en todos los municipios de la zona, el vino y todo lo
relacionado con este producto es el centro de todas las actividades de la
localidad.
Por lo tanto, es un destino paradisíaco para los amantes de la
vitivinicultura y el enoturismo.
De hecho, cuenta con muchas bodegas de gran calidad, y la oferta es
inmejorable.
Pintorescas callejuelas
A su vez, los aficionados al arte también tienen la oportunidad de disfrutar
con diversas obras arquitectónicas como la parroquia de San Andrés y la
ermita de la Virgen de la Plaza, un capricho de la arquitectura del siglo
XVII.
Perderse por sus calles bien trazadas, unidas entre sí por pintorescas
callejuelas repletas de palacios y casas de piedra blasonadas, es una
auténtica delicia.
Si visitamos Elciego a principios de septiembre, pondremos el broche final a
nuestra visita con las fiestas de la Virgen de la Plaza, las más importantes
de la localidad, que se celebran el 8 de septiembre.
El buen ambiente, el bullicio y la música inundan las calles durante estas
fechas. Además, presenciaremos sus danzas autóctonas, conservadas a través
de los siglos, al son de la música de los Gaiteros y Tamboril, de gran
tradición en el pueblo.
Samaniego perteneció a Laguardia como cabeza del llamado Tercio de
Samaniego, integrado por Villabuena, Baños de Ebro, Elciego, Navaridas,
Leza, Páganos y Berberana. Fue en 1668 cuando obtuvo el título de villa.
La importancia del pueblo radicó en su ubicación militar transfronteriza.
Era la avanzada de las fortificaciones de la plaza fuerte de Laguardia en el
extremo occidental en su frontera con la Sonsierra.
De las murallas y los castillos de antaño sólo queda hoy un torreón circular
junto al que posteriormente se construyó el templo actual.
Su posición transfronteriza atrajo a diversas familias de abolengo, de entre
las que destacarían especialmente los Samaniego y los Fernández de Berrueco.
6. Comer en Samaniego
Hector Oribe
C/ Gasteiz 8,
01309 Paganos España
+34 945 60 07 15
Bodegas Baigorri Restaurante
Ctra. Vitoria-Logrono Km 53,
01307 Samaniego España
+34 945 60 94 20
Restaurante Viura
C/ Mayor, S/N Viura Hotel,
01307 Villabuena de Álava España
+34 945 60 90 00
una vez comidos y paseados nos encaminamos hacia el Maravilloso pueblo
de
7. San Vicente de la Sonsierra
Dos son los elementos más llamativos para el viajero, un
maravilloso paisaje de viñedo y un fabuloso patrimonio cultural.
Paisaje de viñedo y San Vicente de la Sonsierra al
fondo
Por un lado, tenemos más de 30 bodegas diseminadas en su término
municipal, con la imponente presencia de la Sierra de Cantabria
y él sinuoso paso del río Ebro. Por otro, un destacable
patrimonio etnográfico, cultural, histórico y monumental.
Un Castillo visitable y magníficos ejemplos de arte románico,
gótico y barroco, además de trece necrópolis medievales
antropomorfas, eremitorios, un dolmen y un menhir prehistórico.
Se han documentado más de ochenta lagares y prensas rupestres,
verdadera arqueología de la cultura vitivinícola, algunos de
ellos bien señalizados y visitables. Son numerosos también los
guardaviñas, ejemplos de arquitectura popular.
Recinto amurallado de San Vicente de la
Sonsierra
El viajero tiene la posibilidad de hacer un recorrido mixto
por el casco urbano y el entorno natural.
El mejor plan para visitar San Vicente de la Sonsierra es
pernoctar en la zona, puesto que las opciones son múltiples y
no se puede dejar pasar la oportunidad de degustar, sin prisa,
sus magníficos vinos y sus propuestas gastronómicas.
La economía y la cultura del vino caracterizan San Vicente de la
Sonsierra
El Ayuntamiento está haciendo un esfuerzo importante para que el
viajero disponga de información accesible a través de códigos QR
que faciliten la visita autoguiada a los variados recursos
patrimoniales del municipio.
Códigos QR del Ayuntamiento de San Vicente de la
Sonsierra para visitas autoguiadas
Desde ArqueoTrip queremos dar las gracias a Ana Sabando y a
Maribel García por su visita guiada. Nos han desvelado
detalles de la cultura del vino y del fabuloso patrimonio
cultural del municipio que, han hecho de esta visita, una
experiencia viajera sobresaliente.
Recorrido Urbano
Puente medieval de San Vicente de la Sonsierra
La subida al Castillo de San Vicente de la Sonsierra, permite disfrutar de
buenos ejemplos de casas blasonadas.
Casa blasonada en la subida al recinto fortificado de San Vicente de la
Sonsierra
El Castillo ocupa la zona más elevada del municipio y está asentado
sobre restos celtibéricos y romanos. Sin embargo, refleja en sus
estructuras una historia continuada hasta la actualidad.
Recomendamos visitar el recinto amurallado y la torre del homenaje, para
disfrutar de unas magníficas vistas del paisaje de viñedo y del río
Ebro.
Torre del Reloj en el Castillo de San Vicente de la
Sonsierra
Torre del homenaje de San Vicente de la Sonsierra
Santa María la Mayor, San Vicente de la Sonsierra
Aconsejamos la visita a la Iglesia de Santa María la Mayor, en el
interior del recinto fortificado, un magnífico ejemplo de arquitectura
del siglo XVI de estilo gótico tardío. Es su interior nos podemos llevar
varias sorpresas interesantes. Os mostramos algunas, pero hay más…
Iglesia de Santa María la Mayor, con representación de monjes, clérigos
y guerreros
Pila bautismal finales del S XIII o principios del XIV,
Curioso retrete en la Iglesia de Santa María la Mayor
En la base del cerro del castillo, existe un buen número de calaos,
muchos de ellos bastante antiguos. Se trata de bodegas subterráneas
recuperadas por el Ayuntamiento o en uso por particulares. Algunas se
pueden visitar, merece la pena asomarse.
Calao o bodega subterránea en el recinto fortificado
Recorrido por el Contorno
El recorrido urbano se debe completar con un segundo recorrido en el
entorno. Destacamos por su especial relevancia el
Conjunto Arqueológico de Santa María de la Piscina, siglo XII
con una necrópolis de repoblación de los siglos X al XIV.
Conjunto Arqueológico de Santa María de la Piscina, San Vicente de
la Sonsierra
La fotografía que encabeza este este post, muestra la calidad de uno
de los mejores ejemplos de arte románico de La Rioja.
Interior de la iglesia románica de Santa María de la Piscina, siglo
XII
Detalle de un capitel de la iglesia románica de Santa María de la
Piscina, siglo XII
Un monumental patrimonio en medio de un paisaje de viñedo que en otoño
transmite sensaciones únicas al viajero. Pero el entorno ofrece más
sorpresas, algunos de ellos nos remontan a la prehistoria.
Dolmen de la Cascaja, muy próximo a la iglesia románica de Santa
María de la Piscina
Dejamos para una de las tardes de nuestra escapada, la ruta senderista
hacia la Necrópolis de San Andrés y lagares y prensa rupestres de
Hornillos, en medio del viñedo, 100% recomendable.
Necrópolis de San Andrés y Lagares Rupestres de Hornillos
Junto al lado este de la Ermita de Santa María de La Piscina, sobre una
ladera suave que desciende hacia el valle, se encuentra una necrópolis de
repoblación, con tumbas datadas entre los siglos X y XIV.
Se han encontrado 49, aunque hay cuatro más junto al muro este de la
iglesia, próximas al ábside. Las de mediados del siglo X son
antropomórficas, talladas en la roca caliza del suelo; las del siglo XII
son de lajas y el resto, de los siglos XIII y XIV, son sarcófagos exentos.
La existencia de tumbas anteriores a la construcción de la ermita
evidencia que la zona estuvo poblada antes de la elección de este sitio
para su construcción.
Necrópolis medieval de San Andrés, al fondo San Vicente de la
Sonsierra
Los lagares rupestres de la Sonsierra, zona productora de vino, son
bases de prensas para pisar la uva que han sido talladas en la roca
caliza para facilitar las tareas de vendimia.
En esta comarca hay muchos situados en términos agrícolas de la zona y
en algunas necrópolis medievales. Por su escasa capacidad sólo debían
cubrir las necesidades familiares de los propietarios en una economía de
subsistencia.
Lagares Rupestres de Hornillos
Se trata generalmente de lagares totalmente excavados en la roca,
formados por un gran recinto circular en desnivel, lugar donde se
deposita la uva, y un depósito adosado de mayor profundidad “el torco”,
comunicado con el anterior por un canalillo en el que se recogía el
jugo.
Aunque son de difícil datación, los últimos descubrimientos han
localizado uno anterior al siglo XII y en otros casos parecen
posteriores al siglo XIV.
El conjunto de Hornillo podemos considerarlo una antigua bodega de
elaboración de vinos blancos y rosados.
Lagares Rupestres de Hornillos
En este entorno encontramos en una gran lastra cuatro lagares en muy
buen estado y un trujal (formado por prensa con pileta y torco
rectangular unidos por un canal) además de un chozo o guardaviñas de
planta cuadrada en el extremo sur de la parcela.
En la parte plana (base de la prensa) se depositaba la uva sobre un
receptáculo de cesta o de madera y sobre él se prensaba para conseguir
el mosto, que era recogido en el torco y posteriormente transportado en
los pellejos hasta las bodegas de San Vicente por los "mosteros"
8. Para Comer en San Vicente de la Sonsierra
Restaurante Casa Toni
Calle Zumalacarregui 27,
26338 San Vicente de la Sonsierra España
+34 941 33 40 01
La Tercera Estacion
Calle Remedio 14,
26338 San Vicente de la Sonsierra España
+34 941 33 45 01
Asador Los Nietos
Calle Mesones 30,
26330 Briones España
+34 941 32 24 45
y si nos gusta el Senderismo, en la zona podemos realizar
9. Senderismo: Sendero del vino Dolmenes y Ermitas
San Vicente de la Sonsierra (00 minutos)
Salimos de la población, bordeando el Castillo, por el Barrio de San Juan.
Cruzamos el barranco Rueda y ascendemos por el camino de la derecha.
Llegamos a la carretera de Baños, caminamos unos metros y tomamos un
camino a la izquierda.
Bordeamos una cantera y llegamos a la Necrópolis de Artajona (San Pablo).
Seguimos el camino de la derecha y a la altura de un chozo, giramos hacia
la izquierda y continuamos hacia Abalos.
Ábalos (1 hora 50 minutos)
Tras el recorrido urbano, se sale bordeando el palacio del Marqués de
Legarda, en dirección al área recreativa "La Te¬jera" y a la ermita
románica de Santa Maria.
Santa María de la Piscina (2 horas 30 minutos)
El conjunto está formado por la ermita, restos del antiguo poblado de
Pecina (Picinia) y la necrópolis. Un camino asfaltado nos llevará hasta el
Dolmen de la Cascaja y, posterior¬mente, hasta la aldea de Peciña, donde
visitaremos la igle¬sia de San Martin y contemplaremos la vista
panorámica.
Necrópolis de Hornillos (4 horas)
El Camino del Romeral nos conducirá al término de San Andrés, donde se
encuentra la gran necrópolis de Hornillos, que cuenta con sepulturas,
restos de una antigua ermita y dos lagares rupestres. A continuación, el
camino accede a la ermita de San Martín.
Desde este punto nos dirigimos hacia la carrelera, que cruzaremos para
tomar, poco después, un camino a la izquierda que llega a San Vicente.
San Vicente de la Sonsierra (5 horas 35 minutos) Fin del recorrido.
AMPLIACIÓN A LA ERMITA DE LA VIRGEN DE LA ROSA
Le ascensión desde Abalos a la ermita de la Virgen dele Rosa es muy
recomendable Para ello, salimos de la población por la calle Virgen de la
Rosa, que posteriormente se transforma en camino de tierra y, al final, en
una estrecha senda entre el bosque.
La imagen de la ermita se divisa al culminar la ascensión, tras una hora y
cuarto de recorrido.
10. Labastida
Labastida, Rioja Alavesa
Se encuentra al abrigo del monte Toloño (1.271 m), mientras que por el
sur está flanqueado por el río Ebro, frontera natural entre el
territorio histórico de Álava y la comunidad de La Rioja.
Labastida es una parada indispensable para todo aquel que quiera conocer
de cerca todos los secretos y entresijos del vino. Por un lado, nos
sorprenderán las impresionantes viñas que se extienden por toda la
zona.
Por otro, se pueden visitar y recorrer las bodegas del municipio,
desde las cuevas y calados de antaño hasta las grandes bodegas
actuales.
Muchos de los habitantes viven del negocio del vino, pilar fundamental
de la economía de la localidad.
Ermita del Santo Cristo, Labastida
En el casco antiguo se halla la ermita del Santo Cristo, de
estilo románico y gótico. Además, debemos destacar los arcos Toloño y Larrazuria, que hace tiempo cumplían la función de puerta de acceso.
El vino y su cultura tienen un gran peso en las actividades del pueblo y
también en sus fiestas. Todo el año es apropiado para acercarnos hasta
Labastida, pero el mes de noviembre lo es aún más.
No en vano, es a mediados de ese mes cuando termina el trabajo de la
vendimia, por lo que organizan las fiestas de acción de gracias de la
vendimia para festejarlo. Durante estos días, la música y el buen
ambiente se adueñan de las calles del municipio.
11. Salinillas de Buradón
Salinillas de Buradón, Rioja Alavesa
Salinillas fue un pueblo que surgió al abrigo de Buradón, uno de los
cuatro grandes castillos que defendían la frontera natural del Ebro
durante la ocupación musulmana: Término, Cellorigo, Bilibio y
Buradón.
Por ello no se encontraba en su localización actual, en mitad de un valle
franqueado por suaves montañas y varios kilómetros hacia el interior
alavés, sino cerca de la fortaleza que le dio nombre, en el entorno de las
Conchas de Haro.
Sin embargo, y como a veces ocurría durante la Edad Media, el pueblo
entero fue trasladado, probablemente en busca de mayor seguridad debido a
los continuos ataques musulmanes que hacían mella en la población, y
también porque se decidió explotar las salinas que le dan nombre.
Durante las guerras castellano-navarras en busca de la definición de
una nueva frontera, Salinillas de Buradón se amuralló y fue privilegiada
por Alfonso X de Castilla y su hijo Sancho IV, que le dieron fuero de
población y ventajas económicas para explotar las salinas.
El nuevo emplazamiento de la villa fue escogido por tratarse de un cruce
de caminos, ya que varias vías comerciales e incluso el Camino de Santiago
se cruzaban en ese punto. También se aprovechó la cercanía de las salinas,
que estuvieron en funcionamiento desde el siglo XII hasta el XIX, cuando
se abandona la producción.
La sal era un elemento de gran valor en la Edad Media y era el gran
motor económico de esta aldea, además de que su producción era alentada
por los reyes, ya que obtenían grandes beneficios de su comercio y de los
impuestos que recaudaba. En tiempos de Alfonso XI las salinas fueron de
explotación real, pero más tarde la producción pasó a ser libre a cambio
del pago de un canon fijo al rey.
El recinto urbano de Salinillas todavía conserva gran parte de sus
impresionantes murallas medievales y además el acceso norte y el sur casi
intactos.
Ambos se componen de una maciza torreta, de tres plantas, que conserva
algunos de los elementos defensivos más característicos de la Edad
Media, como las ventanas saeteras del segundo piso, por donde
transcurría el paso de ronda, y en el tercero, un pequeño vano de
observación y ataque.
Salinillas de Buradón, Rioja Alavesa
Su muralla, de buena mampostería, todavía se conserva en bastante buen
estado y enlaza las cuatro puertas con las que contaba la villa: una en
cada uno de los puntos cardinales.
Además, en la puerta sur, se puede intuir la presencia del rastrillo por
la ranura del intradós de las jambas. Era el acceso principal a la villa,
y por ello en su fachada se colocaron los escudos de los Sarmiento y de
los Ayala, apellidos unidos por matrimonio a finales del siglo XIV y los
señores de la villa.
Pero lo más sorprendente de Salinillas de Buradón se encuentra en el
interior, donde podemos contemplar una curiosa construcción, hoy en
ruinas, que nos permite otear la grandeza que tuvo que tener este pueblo
en el pasado.
Cercano a la muralla y al lado de la Plaza Mayor, existe un inmenso
palacio renacentista que contrasta de forma asombrosa con el
entorno medieval que lo circunda y que alberga en su interior una torre
medieval rodeada por las bellas fachadas palaciegas.
Palacio Renacentista, Salinillas de Buradón
La torre del interior perteneció a los Sarmientos y Ayalas, señores de
esta villa, responsables también de la construcción del hospital que
atendía y protegía a enfermos, pobres y peregrinos, y que todavía se
encuentra en las inmediaciones.
La casa-torre data de principios del siglo XIV y defendía y guardaba
la villa, pero también era la vivienda particular de esta poderosa
familia.
En algunos tramos sus muros miden más de metro y medio de grosor y tenía
su acceso, todavía visible, al sur de la torre, por la actual Plaza Mayor,
que en aquel momento funcionaba como plaza de armas del recinto
medieval.
El torreón conserva su planta rectangular, ventanas saeteras, vanos
rematados en arco, apuntados o de medio punto, y modillones y mechinales
que servían para sostener las vigas del edificio, que hoy en día se
encuentra hueco.
Restos del Castillo Medieval, Salinillas de Buradón
Castillo de Buradón.
La fortaleza medieval y sus restos están en la cima o peñasco que coronan
lo que hoy en día conocemos como el paso de las Conchas de Haro que en
tiempos actuaba como una muga natural.
Este punto era estratégico porque está en la boca de un desfiladero que
comunica la Llanada y la Ribera Alavesa con el Valle del Ebro.
Ahora no queda más que resto arqueológicos de este edificio de
defensa bizantino que controlaba el territorio y toda la Sonsierra en la
época de Reino de Navarra.
12. y para Comer en Salinillas de Buradón
El Rincón de Buradon
01212 Salinillas de Buradón, Álava
Teléfono: 945 38 69 79
Restaurante Las Cepas
01212 Salinillas de Buradón, Álava
Teléfono: 945 33 72 32
13. Castillos de Portilla y Lanos
Castillo de Portilla
Castillo de Portilla, Alava
El castillo de Portilla se sitúa en lo alto de una abrupta peña de
780 mts. de altitud, estrecha y alargada, que le proporciona una
característica planta en forma de barco.
Las ultimas investigaciones apuntan a que fue construido muy
posiblemente en la primera mitad del siglo XI, bien por el monarca
pamplonés Sancho Garcés III el Mayor (1004-1035), bien por su hijo
García Sánchez III (1035-1054), como medio para fijar su autoridad
sobre suelo alavés, dentro de un proceso general de expansión y
fortalecimiento del reino de Pamplona en el condado de Castilla.
Las investigaciones arqueológicas permitieron documentar además
una compleja articulación poliorcética organizada en tres niveles
diferentes:
El nivel inferior
Situándonos en la cara meridional del imponente farallón rocoso que
alberga el castillo de Portilla observamos la existencia de un
pequeño collado donde se levantaba un cuerpo de guardia (A) que
defendía el primer acceso al castillo por el sur.
La robustez de las entalladuras y los diferentes mechinales abiertos
en la roca hacen pensar en un gran edificio construido íntegramente
de madera. Además, sobre el cabezo oriental se situaba un pequeño
torreón de vigilancia (B) del que apenas conservamos el arranque de
su cimentación, cajeada en la roca. Al noreste del cuerpo de guardia
nacía un estrecho pasillo o corredor (C) que recorría el farallón
por su cara septentrional.
Al inicio de este pasillo se levantaba una pequeña garita de control
(D) de la que solo conservamos los cajeados de su base, destinados a
alojar los zócalos de piedra, sobre los que cabe imaginar alzados
perecederos de madera.
En su parte final, el pasillo comunicaba con otro camino que, desde
la Villavieja, ascendía sinuosamente hacía el castillo. Ambos
caminos convergían en una estructura en rampa, actualmente
desmantelada, en cuyo arranque pudo situarse la puerta de entrada
por el norte (E).
Imagen aérea y planta del castillo de Portilla.
El nivel intermedio
A través de la estructura antes descrita se accedía a la terraza
intermedia del complejo defensivo (F), que habilitaba el acceso al
recinto superior.
Manteniéndonos en esta terraza, pero en su extremo occidental, se
situaba además el aljibe de la fortaleza (G).
Se trata de una estructura excavada parcialmente en la roca,
cubierta por una bóveda rebajada de lajas calizas, en cuyo remate
debió abrirse un orificio cenital que permitía la recogida del agua
de lluvia proveniente del foso.
El nivel superior
El nivel superior del castillo se concibió originalmente como una
plataforma rectangular delimitada en todo su perímetro por una
muralla de piedra de grosor variable que ampliaba la escasa
superficie de uso de la peña (H).
Esta “zona alta” de la fortaleza acogía las principales estructuras
defensivas, productivas y habitaciones del castillo, distribuidas en
siete espacios bien diferenciados.
El primero de ellos (I), semiexcavado en la roca, constituía
un nuevo cuerpo de guardia que controlaba el acceso al recinto y
articulaba el paso hacia el resto de estructuras del recinto
superior.
La presencia de numerosos agujeros de poste en el perímetro exterior
de esta estancia demuestra la existencia de un alzado superior
lígneo, integrado por un armazón de postes entre los que se
situarían cierres de tablazón de madera, en tanto no se han hallado
restos de adobe, ladrillo o arcilla que denuncien el empleo de otras
técnicas constructivas.
Recreación del Castillo de Portilla en el siglo XII
Como señalamos, esta estancia permitía el acceso al resto de
estructuras situadas al este y oeste de la fortaleza. El espacio
situado inmediatamente al este (J) se documentan numerosos agujeros
abiertos en la roca destinados a alojar diversas estructuras lígneas
de las que, en el estado actual del conocimiento, desconocemos su
naturaleza y dimensiones.
Quizás, atendiendo al resto de actividades registradas, pudieron
funcionar como espacios de almacén, cocina o dormitorio para la
guarnición. Más al este se documenta una nueva estancia cuya planta
va a ser producto del rebaje efectuado al sustrato rocoso (K). Las
excavaciones efectuadas en el año 1991 permitieron registrar en su
interior una pequeña oquedad abierta en la base del muro oriental,
con bóveda de horno, de funcionalidad metalúrgica.
Atendiendo a la presencia de varias clavijas corneas de mamífero en
el suelo asociado (cuyas astas son comúnmente utilizadas como mangos
de cuchillos) podemos asociar esta estancia con una pequeña fragua
destinada a la fabricación de utensilios para el castillo
(cuchillos, puntas de ballesta, apliques de cobre para adorno de las
vestiduras o el mobiliario, etc). En el extremo oriental del recinto
se levanta un torreón semicircular que remata la fortaleza por este
costado (L), cumpliendo labores indudablemente defensivas.
Hacia el oeste se sitúan las estructuras más destacadas. En primer
lugar documentamos la torre del homenaje (M), levantada sobre un
escarpe rocoso que hace de este edificio el más alto de la
fortaleza. A pesar de su deficiente estado de conservación es
posible determinar la presencia de un imponente edificio
rectangular, en cuya planta baja se abrían sendos accesos
enfrentados al este y oeste.
El acceso oriental se situaba a unos 2 metros de altura con respecto
al suelo de la plataforma superior, cota que debió salvarse mediante
una escalera de madera desaparecida.
El occidental, por su parte, facilitaba el paso hacia el foso
que pronto describiremos. En el interior de esta primera planta se
sitúa un estrecho patín de piedra que ascendía al primer piso de la
torre, del que aún se aprecian algunos mechinales de las vigas
pertenecientes al forjado del suelo.Inmediatamente al oeste de la
torre se abrió un foso (N) de dimensiones notables, excavado
cuidadosamente en la roca, que protegía el torreón de
poniente.
Su remate aún conserva las entalladuras de apoyo de las traviesas
del puente que, por su extremo norte, salvaba el paso y facilitaba
el acceso al mencionado torreón (LL). A juzgar por los restos
conservados, parece tratarse de una amplia estancia rematada en su
extremo occidental por un torreón semicircular dotada de pequeñas
ventanas aspilleras.
Castillo de Lanos
Castillo de Lanos-Ocio, Alava
El Castillo de Lanos, se encuentra en lo alto de un risco desde el
cual domina la pequeña localidad de Ocio.
Es por eso que también es conocido como Castillo de Ocio, el cual
forma parte del municipio de Zambrana.
A pesar de no tener muchos datos sobre el origen de este Castillo de
Álava, se cree que sus primeras construcciones fueron en el siglo
XI. Algo que sí sabemos, es que fue tomado por Sancho IV de
Castilla.
Al llegar al Castillo de Lanos, vemos que es inaccesible por tres de
sus cuatro lados. Esto se debe a que se encuentra al borde de un
precipicio, lo que nos muestra su carácter defensivo. Esta
fortificación está construida de arenisca y su cuerpo principal está
formado por una torre del homenaje. Antiguamente, esta torre estaba
protegida por dos recintos y torres defensivas.
El Castillo de Lanos es una fortaleza en estado de ruina, situada en
lo alto de un risco del concejo de Ocio.
En la actualidad, el Castillo de Lanos se encuentra en estado de
ruina y es algo que se puede apreciar en su interior, ya que está
repleto de vegetación y agujeros en sus muros. A pesar de que se
iniciaron labores de rehabilitación, si decides visitar esta
fortificación podrás ver su mal estado. Pero ese es el encanto
principal de este castillo, ya que es un pedazo de historia que no
puedes perderte.
Si somos aficionados al Senderismo, no podemos pasar por la zona sin
acercatrnos a Berganzo para hacer la Ruta del Agua
15. Senderismo: Ruta del Agua (Berganzo)
Esta sencilla ruta nos permitirá visitar la hermosa cascada de las
Herrerías partiendo del casco urbano de Berganzo.
El sendero sigue el curso del río Inglares aguas arriba a la
sombra de las hayas hasta la cascada.
Las aguas del Inglares descienden desde Peñacerrada hasta Berganzo
salvando un desnivel de 200 m en menos de 5 km, lo que origina
pequeños rápidos y bellas cascadas.
El camino de vuelta se realiza junto al antiguo canal de agua que
fue construido para alimentar la central hidroeléctrica de
Berganzo.
En 1897 la Sociedad Electro Hidráulica Alavesa aprovechó este
desnivel construyendo la central hidroeléctrica de Berganzo, que
sigue en funcionamiento en la actualidad, abasteciéndose a
través del canal que bordeamos en nuestra ruta.
Esta bonita ruta circular da su inicio y final en la localidad
de Berganzo.
Un total de 10 kilómetros donde pasar media jornada.
Comenzamos serpenteando el río Inglarés y descubriendo las
diferentes pozas que se forman en los recodos.
En verano podemos pegarnos algún que otro chapuzón.
Puedes descargarte el Track de la ruta en nuestro enlace de
Wikiloc.
A mitad de recorrido llegamos a la Cascada de las Herrerías y debemos remontarla para volver a Berganzo por antiguo canal de
la hidroeléctrica.
el siguiente destino es la cercana
16. Villa Amurallada de Peñacerrada
Peñacerrada, Alava
Peñacerrada es una villa de origen medieval, que se ubica en el límite
fronterizo de los antiguos reinos de Navarra y Castilla, en un
estratégico cruce de caminos. Además sigue conservando su recinto
amurallado, del que sobresale una magnífica puerta, denominada Puerta
Sur.
El documento conocido como Reja de San Millán de 1025 menciona una
extensa lista de localidades alavesas indicando los diezmos que estas
pagaban al Monasterio de San Millán de La Rioja.
Este documento permite establecer la extensión que tenía Álava en el
siglo XI, los distritos o alfoces en los que se dividía, así como las
poblaciones que existían por aquel tiempo y los nombres que tenían.
Varios de los pueblos comprendidos en el actual municipio de
Peñacerrada aparecen mencionados por primera vez en este
documento.
Son las aldeas de Zumento, Baroja, Loza, Aima y Faido, que se
mencionan integradas en el alfoz alavés de Rivo de Ivita, junto con
otras localidades que en su mayor parte se encuentran actualmente en el
Condado de Treviño.
Puerta Sur de Peñacerrada
Cada una de estas cinco localidades contribuía al Monasterio con el
tributo de una reja de hierro.
Fundación de Peñacerrada
Peñacerrada no se menciona en la Reja de San Millán de 1025, tal vez
porque se encontraba fuera de los límites del territorio alavés de la
época.
La tradición manda que la población fue fundada en el siglo VIII cuando
sus primeros moradores se instalaron en el término conocido como
Urizarra, nombre que significa en lengua vasca Villa vieja.
El emplazamiento original de la población se encontraba al noreste de la
actual población, en la margen opuesta del río Inglares y sobra la
cumbre rocosa de un cabezo. En la actual se conservan las ruinas de un
castillo en ese emplazamiento.
En el año 1295 Peñacerrada aparece como villa de la Hermandad General de
los Consejos de Castilla, sin que se sepa la fecha concreta en que fue
aforada, aunque puede considerarse la de 1256 como fecha más probable,
ya que ese año se fundaron las villas de Salvatierra y Santa Cruz de
Campezo.
En 1377 el rey Enrique II de Castilla cedió las villas alavesas de
Peñacerrada, Lagrán y Marquínez a Diego Gómez Sarmiento que fue
mariscal de Castilla4 y adelantado mayor de Castilla y de Galicia y estaba casado con
Leonor Enríquez de Castilla, señora de Salinas de Añana y nieta del rey
Alfonso XI de Castilla.
El historiador Hegoi Urcelay Gaona señaló que la villa de Peñacerrada le
fue cedida al mariscal Diego Gómez Sarmiento junto con todos sus
derechos, rentas, justicia civil y criminal y el mero y mixto imperio.
Comenzaremos nuestro recorrido en la hermosa iglesia parroquial de
Nuestra Señora de la Asunción, en Peñacerrada, que ofrece una
interesante portada románica y un bello retablo del siglo XVI.
Cuevas de San León, Peñacerrada
Sala de las Formaciones
Desde allí, nos dirigiremos a la Plaza de los Fueros, donde se encuentra
el palacio de los Duques de Hijar, construida en el siglo XVII y que
albergará el "Centro de Interpretación del Ámbar".
En este sentido, cabe destacar que en Peñacerrada fueron hallados
importantes yacimientos, convirtiendo el ámbar del municipio en único en
el mundo, tanto por su antigüedad como por la calidad de los fósiles.
Cuevas naturales y artificiales
En las inmediaciones de la localidad de Peñacerrada, por ejemplo,
divisaremos las dos cuevas naturales de San León.
Cuevas de San León, Peñacerrada
Otro de los núcleos que merece especial mención es Faido, enclave que
alberga el conjunto de
cuevas artificiales de la Virgen de la Peña, San Miguel y
Kruzia.
Destaca entre los tres la cueva que corresponde a la ermita de la
Virgen de la Peña.
Además del patrimonio histórico, Peñacerrada nos ofrece la posibilidad
de disfrutar de su espléndido entorno.
Dentro del municipio se encuentra el
Yacimiento Arqueológico de las Yurdinas, una cueva natural que
incluye restos funerarios.
Las principales fiestas del núcleo urbano de Peñacerrada tienen lugar el
6 de octubre, en honor a Nuestra Señora del Rosario.
17. Conjunto Eremitorio de Nuestra Señora de la Peña, Faido
Hace 1.500 años, en plena época visigoda, Álava estaba habitada por
eremitas. Estas comunidades cristianas vivían alejadas de la jerarquía
de la iglesia. Su vida era sencilla, construyendo cuevas artificiales
donde habitaban sin grandes lujos.
Hasta nuestros días ha llegado una joya, poco conocida al estar más allá
de los Montes de Vitoria. Hoy desvelamos la ermita de Nuestra Señora de
la Peña. ¿Nos acompañas?
Ermita de Nuestra Señora de la Peña
En el municipio de Faido, a 25 kilómetros de Vitoria-Gasteiz y haciendo
frontera con el Condado de Treviño, nos encontramos con ésta pequeña
aldea. Morada en la Alta Edad Media por una comunidad de eremitas, se
levantó en el siglo VII el conjunto rupestre de Nuestra Señora de la
Peña; uno de los más espectaculares de Álava.
Este interesante complejo está excavado en la propia roca, horadando un
gran peñón de arenisca. Es por ello que se le ha bautizado como ermita
de la Peña.
Hablamos de “conjunto” o “complejo” ya que ésta ermita eremítica está
formada por cinco niveles de cuevas superpuestas comunicadas entre sí, a
través de pozos interiores o escaleras talladas. De estos cinco niveles,
dos de ellos eran usados como templos religiosos (nivel 2º y 3º) algo
que hay que tener en cuenta y que otorga fascinación al complejo por
albergar dos iglesias rupestres.
Cronología de las diferentes etapas constructivas de la ermita de
Nuestra Señora de la Peña.
La ermita de Nuestra Señora de la Peña está claramente dividida en dos
partes: el propio templo excavado en la roca que data del siglo VII y el
edificio anexo que hace tanto de vestíbulo de entrada como de cubierta
de las iglesias rupestres (construido en el siglo XIII).
Nuestra Señora de la Peña es la ermita cristiana en activo más antigua
del País Vasco. Es así que en 1984 fue declarada Monumento Nacional de
Euskadi. En la actualidad se sigue abriendo al culto cinco veces al año.
Nivel 1º (cueva inferior)
Antes de llegar al acceso principal de la ermita, nos topamos con esta
primera cueva en muy mal estado. Se puede observar en sus paredes
diferentes agujero u oquedades, posiblemente usados para sujetar vigas.
A la derecha de la entrada vemos un pequeño pasadizo ascendente que
podría comunicar con el segundo nivel, aunque a día hoy está cegado.
Cueva inferior adosada a la fachada de la ermita románica.
Nivel 2º (iglesia inferior)
Para acceder a éste segundo nivel tenemos que entrar por la ermita anexa
al peñón rocoso que se edificó en el siglo XIII. Tras atravesar la
puerta de doble arco de medio punto, accedemos al vestíbulo o pórtico.
Nos llama la atención el mural gótico (siglo XVI) con el que nos topamos
de frente, el cual representa El Calvario.
Mural de “El Calvario” y vestíbulo románico (s. XIII).
Una vez atravesado éste vestíbulo, y paralelo al mismo, llegamos a la
nave principal de la iglesia rupestre, toda ella excavada en la roca.
Encontramos cuatro estancias: la nave principal, el coro y dos pequeñas
cámaras.
La nave principal es de planta rectangular, con bóveda de medio cañón y
cabecera orientada al este. Sorprende el retablo barroco (s. XVIII),
posterior a la construcción de la iglesia y tallado completamente en la
roca.
Es aquí donde descansa la talla en piedra de la Virgen de Nuestra Señora
de la Peña (s. XIII) del tipo “Andra Mari”.
En el lado opuesto al retablo encontramos una pequeña estancia irregular
que se abre a la nave a través de dos puertas desiguales y elevada por
varios peldaños. Es posible que su uso fuese como tribuna o coro.
Plano iglesia inferior de la Virgen de la Peña.
En la pared izquierda de la nave se abren dos pequeñas estancias de
planta rectangular. En la cámara de la derecha se puede observar una
sepultura y un gran hueco que pudo también ser una sepultura.
La estancia de la izquierda resulta más interesante ya que fue usada
como baptisterio, albergando una pila bautismal tallada toscamente en
roca y pegada al suelo con argamasa. No se está muy seguro de la
datación de la pila bautismal. En ésta cámara también encontramos una
sepultura de grandes dimensiones.
Nivel 3º (iglesia superior)
Para acceder a éste nivel es necesario retroceder nuestros pasos hasta
la entrada de la ermita románica. Allí nos topamos con unas escaleras de
madera las cuales ocultan las originales talladas en roca y que
ascienden hasta la segunda iglesia o iglesia superior.
Al fondo del vestíbulo, el acceso a la iglesia superior.
La nave es de planta oblonga con bóveda de medio cañón. La cabecera,
situada al este, es de gran interés. Más baja que la nave y con bóveda
de cascarón, ésta se abre con arco de medio punto que descansa sobre
jambas.
En la bóveda de la cabecera se talló una argolla para colgar algún
tipo de iluminación y podemos observar un pequeño altar.
En la pared norte se abren dos oquedades. La de la izquierda es una
pequeña cueva que no tiene gran interés. La estancia de la derecha es la
que realmente nos causa fascinación debido a una figura arborescente de
líneas rojas que hay pintada en el muro sobre una sepultura.
En ella vemos también dibujos circulares que pueden representar los
frutos del árbol. Esta ilustración se repite en la cabecera de la nave.
Fuera de la nave principal se encuentran elementos tallados en roca
junto con otros de fábrica más moderna. Por lo que resulta complicado su
análisis.
Plano iglesia superior de la Virgen de la Peña.
En la zona de construcción más moderna es donde se repartían las
estancias de los cofrades de la ermita (despensa, gran salón y cocina).
Nivel 4º
Se intuye un cuarto nivel de trabajos rupestres en el sector del
corredor de los cofrades, pero de difícil estudio.
Nivel 5º (cueva superior)
Sobre el tejado de la ermita románica está situado el quinto nivel del
complejo de la Peña. Una pequeña cueva rectangular da cierre a éste
interesante conjunto rupestre. En el techo de la misma podemos observar
dos “argollas” para sustentar algún objeto, así como diversos
mechinales.
Lo más interesante lo encontramos en el dintel de la puerta, una
inscripción visigótica que hoy día cuesta descifrarla.
No podemos olvidarnos de la espadaña de la ermita que se sitúa en lo
alto del peñón. Como queriéndonos hacer partícipes del lugar tan
privilegiado que ocupa.
Cuevas eremíticas de Kruzia y San Julian
No podemos abandonar Faido sin antes visitar las cuevas de Kruzia y San
Julián. Cercanas a la ermita de Nuestra Señora de la Peña, nos hace
recapacitar sobre la importancia que tuvo esta zona en la Alta Edad
Media.
Cuevas de Kruzia
Se localizan a la izquierda del camino que nos conduce al complejo de
Nuestra Señora de la Peña. Dos pequeñas cuevas, parcialmente tapadas por
maleza, se abren en un pequeño promontorio rocoso.
La más interesante es la situada a la izquierda (Kruzia I) en cuyo
interior observamos dos sepulturas.
Si nos fijamos en una de sus jambas descubriremos una interesante, y a
la vez deteriorada, inscripción.
Gracias al estudio paleográfico de estos trazos se ha podido datar
cronológicamente su ocupación (entre los siglos VI y VIII).
La segunda cueva (Kruzia II) no tiene ningún interés, debido a sus
pequeñas dimensiones y ausencia de sepulturas.
Cuevas de San Julián
También conocidas como cuevas de San Miguel, por el monte en el que se
encuentran, se localizan al otro lado del barranco por el que fluye un
pequeño arroyo.
Nos topamos con dos cuevas próximas entre sí. La más grande (San Julián
I) está formada por dos cámaras intercomunicadas. Es necesario acceder a
ella a través de una rústica escalera, ya que la puerta de acceso se
encuentra en altura.
La primera cámara comunica con el exterior y su planta es
rectangular. A mano izquierda, y cercana a la puerta, se abre en la roca
una pequeña hornacina que guarda un recipiente.
Al lado nos encontramos con la puerta de acceso a la segunda
estancia, en la cual vemos grabada en la jamba un crucero. Ésta segunda
cámara es más pequeña que la principal cuya planta es de herradura y
cubierta de cascarón.
Hornacina y segunda estancia en la cueva de San Julián I.
La segunda cueva (San Julián II) es mucho más pequeña y menos
interesante. Nos encontramos con una cavidad de planta de herradura y
bóveda de horno.
Visitas Guiadas a Nuestra Señora de la Peña
La ermita de Nuestra Señora de la Peña se abre al culto varias veces al
año. El resto del tiempo permanece cerrada al público. Tanto en Semana
Santa como en verano salen campañas culturales donde poder realizar
visitas guiadas a diferentes rincones de Álava, siendo la ermita de
Faido uno de éstos puntos.
La visita guiada a la ermita de Nuestra Señora de la Peña tiene una
duración de 30 minutos y el precio son 3€ por persona. En ésta ruta al
pasado se visitará la iglesia inferior y superior del complejo, así como
las diferentes estancias.
Para más información y reservas te puedes poner en contacto con Kalearte
a través de su página web o llamando al teléfono 945101070.
Es posible visitar de forma libre y durante todo el año la cueva
inferior y cueva superior del complejo de la Peña y las cuevas de Kruzia
y San Julián.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuy interesante!! Muchas gracias por contar con nosotros!
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