
Es uno de los más importantes monumentos que tienes cerca de Madrid, pues Aranjuez se encuentra a 45 kilómetros al sur de la capital.
Indice:
- Como Llegar
- Algo de Historia
- Palacio Real de Aranjuez
- Jardín del Príncipe
- Casita del Labrador
- Museo de las Falúas Reales
- Jardín de la Isla
- Jardín del Parterre
- Casco Antiguo de Aranjuez
- Plaza de la Mariblanca
- Patio de Oficios
- Palacio Silvela
- De Tapas por Aranjuez
- Fiestas, ferias y festivales en Aranjuez
- Mar de Ontígola
- Comer en Aranjuez
- Otras Rutas Cercanas
1. Como Llegar :
Si no dispones de coche para ir a Aranjuez, tienes varias opciones.
Si prefieres hacer la visita por tu cuenta tendrás que utilizar las opciones de transporte público disponibles, tren o autobús.
Cómo ir a Aranjuez en tren
En el caso de los trenes, en la Estación de Atocha has de coger la línea de Cercanías C3, con una frecuencia según el horario de entre 20 minutos y media hora, y en la que tardarás unos 45 minutos en llegar a Aranjuez.
El precio del billete en tren desde Madrid a Aranjuez (2018) es de 4,05 euros en cada sentido (zona C1).

Estación Ferrocarril Aranjuez
El tren te deja en la estación de ferrocarril de Aranjuez, la cual se encuentra algo alejada del centro del pueblo, por lo que para llegar al Palacio Real deberás andar unos 20 minutos.
Cómo ir a Aranjuez en autobús
Si prefieres ir en autobús a Aranjuez, dispondrás de mayor frecuencia de servicio.
Para ello deberás coger los autobuses de la empresa Automnibús Interurbanos, los cuales parten hacia Aranjuez desde la Estación Sur y la plaza de Legazpi, en el paseo del Molino, según el horario de que se trate.
Se trata de la línea 423 que tiene unas frecuencias variables de entre cada 15 minutos y cada media hora, dependiendo de la estación desde la que sale.
2. Algo de Historia
Los romanos también habitaron estas tierras, pero fue durante la dominación árabe cuando el lugar alcanzó un enorme valor estratégico por ser territorio fronterizo entre el reino moro de Toledo y los reinos de la Corona de Castilla.
Desde tiempos de los Reyes Católicos, el municipio ostenta la denominación de Real Sitio, pero, sobre todo, serían los Borbones quienes se encargarían de dar a Aranjuez el último impulso que la convertiría en núcleo cortesano de rango monumental.
El plano actual de la villa, con todas sus calles rectas, fue trazado bajo el reinado de Fernando VI, que convirtió Aranjuez en una elegante residencia cortesana. A principios del siglo XIX, Aranjuez fue escenario de la firma de la alianza entre Carlos IV y Napoleón contra Inglaterra, pacto que aprovechó el emperador francés para invadir con sus tropas España.
Fernando VII, hijo de Carlos IV, se alzó contra el Gobierno de su padre, produciéndose en marzo de 1808 el Motín de Aranjuez (Carlos IV abdica y Manuel Godoy es encarcelado).
El 2 de enero de 1835 quedó establecido definitivamente el Ayuntamiento de Aranjuez con José Ignacio de Ibarrola como primer alcalde. En 1899, recibió el título de Villa y en 1940, el maestro Joaquín Rodrigoestrenó su famoso Concierto de Aranjuez, una composición musical para guitarra y orquesta del compositor español Joaquín Rodrigo escrito en 1939, una pieza que ha llevado el nombre de la ciudad a todos los rincones del mundo.
Durante siglos los reyes españoles pasaron los meses de primavera en el Palacio de Aranjuez, debido a su ubicación en una fresca y fértil vega formada por la confluencia del río Jarama y el río Tajo.
3. Palacio Real de Aranjuez
Palacio Real de Aranjuez
Cuando el emperador Carlos V empezó a interesarse por desarrollar Aranjuez como una villa regia con amplio coto de caza se aposentó, como en 1501 había hecho Felipe el Hermoso, en el viejo palacio de los maestres de Santiago.
Fachada sur
Durante todo el siglo XVII se paró la obra, hasta que en tiempos de Fernando VI se acomete una importante ampliación, que continuará Carlos III dotándolo de unas alas que encierran el patio de armas, tal y como se puede contemplar hoy en día.
Un palacio menor, la llamada Casa del Labrador, se sitúa fuera del recinto, formando parte del Jardín del Príncipe.
Los inmensos jardines, proyectados para ensalzar la residencia real de la árida y seca meseta del centro de la península ibérica, y regados con las aguas de los ríos Tajo y Jarama, son los más importantes del periodo de los Habsburgo.

Alcanzaron singular renombre gracias al Concierto de Aranjuez, de Joaquín Rodrigo, considerada la composición musical española más escuchada en el mundo. En 2001 este entorno fue declarado «Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad» por la Unesco.
Del palacio destacan la Sala China, el Gabinete de Porcelana y la Sala de los Espejos.
En el plano histórico, el 25 de septiembre de 1808, en una ceremonia celebrada en la Capilla del Real Palacio de Aranjuez ante monseñor Juan Acisclo de Vera, arzobispo de Laodicea, se constituyó oficialmente la Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino.
La Junta Central quedó formada por los diputados procedentes de las Juntas Supremas de las capitales de los antiguos reinos, tal como quedó decidido en la reunión llevada a cabo el día anterior en la posada en la que se hospedaba el conde de Floridablanca, a la postre, presidente de la tratada Junta.
En 1971 fue inaugurado en la planta baja del palacio el Museo de la Historia del Traje de Corte. En 1983 se cerró el museo porque se consideraba muy poco ortodoxo y un tanto teatral. Se volvió a abrir en 1997 con el nombre de Museo de la Vida en Palacio.
Cuenta con parte de los fondos del antiguo museo y en 2006 se incluyó el uniforme del rey Juan Carlos I el día de su proclamación en 1975, así como el vestido que lució la reina Sofía ese mismo día.
También se puede ver su vestido de novia, además de los de la reina Letizia, la infanta Elena y la infanta Cristina.
También se puede ver su vestido de novia, además de los de la reina Letizia, la infanta Elena y la infanta Cristina.
De 1977 a 1983 sirvió como residencia de jefes de Estado extranjeros en visita de Estado en España.
Anteriormente había tenido este uso el Palacio de la Moncloa, pero al trasladarse al mismo la residencia de la Presidencia del Gobierno, hubo que buscar una nueva ubicación. En 1983 el Palacio Real de Aranjuez dejó de tener este uso, el cual pasó al Palacio Real de El Pardo.
Anteriormente había tenido este uso el Palacio de la Moncloa, pero al trasladarse al mismo la residencia de la Presidencia del Gobierno, hubo que buscar una nueva ubicación. En 1983 el Palacio Real de Aranjuez dejó de tener este uso, el cual pasó al Palacio Real de El Pardo.
Felipe II, haciendo suyo un antiguo proyecto de su padre, el emperador Carlos V, ordena en 1561 la sustitución de la vieja residencia maestral de Aranjuez por un nuevo edificio que es el antecedente del actual Palacio Real.
En 1715, Felipe V continúa con las obras y se construye toda la estructura que conforma el actual cuerpo del palacio.
Entre 1660 y 1665, sufre graves incendios y Fernando VI encarga su reconstrucción. En época de Carlos III añade dos alas laterales que forman el cuerpo occidental del edificio y que reflejan el gusto afrancesado. En su decoración se combinan motivos rococós, isabelinos, chinescos y árabes.
Jardines de Aranjuez
Jardín del Príncipe
Jardín de la Isla
Jardín del Parterre
4. El Jardín del Príncipe
La fuente de Apolo o el Estanque de los templetes clásicos y chinescos son dos de sus estampas más caraterísticas.

Dentro del mismo podremos conocer la Casita del Labrador y el Museo de las Falúas Reales donde podremos ver las embarcaciones que utilizaban los reyes para desplazarse por el río.
Debido a su gran extensión (150 hectáreas) es imposible visitarlo entero pero si haremos un recorrido por sus principales rincones.
Creado por Carlos IV, quien lo inició siendo todavía Príncipe de Asturias y lo concluyó siendo Rey, entre 1789 y 1808.
Contrapuesto al de la Isla, es un Jardín paisajista que sigue la moda inglesa y francesa de fines del XVIII, pero conviene no olvidar que en él se integran elementos anteriores, como la huerta de la Primavera y el embarcadero de Fernando VI, y lo hecho por Carlos IV no es uno sino varios jardines.
Se accede al Jardín por la primera de las entradas monumentales, la puerta del embarcadero, y avanzando por la calle del mismo nombre queda a la derecha la antigua huerta de la Primavera, y a la izquierda el Tajo, que hace una curva con la que se encuentra el final de esta avenida: allí está el embarcadero que da nombre a la calle, precedido por una glorieta con cinco pintorescos pabellones.
El más grande o pabellón real fue levantado por Bonavía en 1754, mientras que los otros cuatro se edificaron durante el reinado de Carlos III, para que el príncipe y la princesa de Asturias, Carlos y María Luisa, los utilizasen como casino de recreo; entonces se dispuso también, entre ellos, el pequeño jardín ochavado, que a modo de patio de honor separaba la calle del Embarcadero y el pabellón principal. Un casino semejante tenía el infante don Gabriel al otro lado del río.
Estos pabellones dispuestos a partir del embarcadero de Fernando Vi dieron lugar al gusto del futuro Carlos IV por este lugar, donde pasaba las mañanas primaverales, y por tanto al Jardín del Príncipe, que fue surgiendo por adiciones sucesivas desde 1772.

A este principio responden los cinco primeros "jardines" o compartimentos más antiguos, que se llevaron a cabo entre 1775 y 1784; el plano entonces dibujado por Boutelou permite imaginar su estado original; pero en la actualidad difieren mucho de aquel aspecto a causa de las numerosas modificaciones que han experimentado, algunas ya bajo Carlos IV.
Dentro del área de los cinco primeros jardines se encuentran dos obras de arquitectura típicas de las "fábricas de jardín" paisajistas, que datan del reinado de Carlos IV y pretendían dar al vergel, visto desde el río, un aspecto pintoresco; ambas fueron dirigidas por el ingeniero Domingo de Aguirre: el Fortín, inmediato al embarcadero, albergaba una batería de cañoncitos, con la que se hacía la salva a las embarcaciones donde los Reyes surcaban el Tajo.
Más arriba, el Castillo, que no llegó a ser revestido de piedra de Colmenar, como estaba pensado, a causa de las dificultades económicas derivadas de la guerra contra Francia, serviría como mirador sobre el río, el jardín y el Soto; en sus grandes salas abovedadas, unidas por escaleras de caracol de piedra, se reserva un espacio para restaurante.
Frente al Castillo se encuentra el Museo de Falúas, construido en 1963 según proyecto de Ramón Andrada, donde se exhiben las embarcaciones en las que los Reyes paseaban por el Tajo. Antes las falúas reales se conservaban en la antigua Casa de Marinos, mandada construir por Carlos IV y restaurada por Amadeo de Saboya. Parte de este edificio aún existe, al otro lado del Tajo.
No se conserva ninguna de las delirantes piezas de la "Escuadra del Tajo" de Farinelli, pero sin embargo se puede ver aquí una pieza tan barroca y espectacular y aún más antigua: la góndola llamada 'de Felipe V", pero que en realidad data del reinado de Carlos II y es anterior a 1668. Probablemente se realizaría en Nápoles.

El resto de las falúas reales aquí conservadas sí son de Aranjuez. Destaca la de Carlos IV, la de Fernando VII y la regalada a Isabel II por la ciudad de Mahón.
Volviendo al Jardín, se recorre el área entre la antigua Huerta de la Primavera y el río: la Fuente de Narciso se construyó en tiempo de Carlos IV, pero, dañada durante la ocupación francesa, hubo de ser rehecha en 1827 por Joaquín Dumandre, que se inspiró en la fuente de los sátiros que adornaba el parterre principal de Villa Albani, en Roma, muy conocida ya desde 1761.
En torno a esta Fuente se situaba el "tercer jardín". El centro del "cuarto jardín" estaba ocupado por una plaza oval donde, antes de 1804, se instaló la Fuente de Ceres, destruida también y rehecha en 1828; ahora sólo queda en su lugar el pilón, porque los grupos escultóricos fueron trasladados al Parterre a principios del siglo XX.
Se llega así a la calle de Apolo, llamada de Isabel II. Durante el reinado de Carlos III acababan aquí los cinco trozos que por entonces estaban hechos del Jardín del Príncipe, limitados por este lado mediante un foso o hâ-hâ, sustituido en época de Carlos IV por la calle actual
Siguiendo hasta el fondo nos encontramos con la Casa del Labrador, una de las construcciones de mayor esplendor de la dinastía borbónica.
Muy cerca del embarcadero se sitúa el Museo de las Falúas, donde se pueden ver las lujosas embarcaciones que navegaron por el Tajo y que pertenecieron a Carlos IV, Fernando VII o Alfonso XII.
Siguiendo hasta el fondo nos encontramos con la Casa del Labrador, una de las construcciones de mayor esplendor de la dinastía borbónica.
Dentro de este jardín encontaramos la
5. Casita del Labrador
5. Casita del Labrador

La Real Casa del Labrador es una de las residencias de la Familia Real Española.
Su construcción comenzó a finales del siglo xviii, a partir de un diseño inicial del arquitecto Juan de Villanueva, que fue transformándose sucesivamente en los trece años que duraron las obras y reformas.
Su aspecto final se debe a Isidro González Velázquez, quien dotó al conjunto de numerosos motivos ornamentales externos.

El interior destaca por su decoración suntuosa, obra de Jean-Démosthène Dugourc, en su mayor parte, y por las pinturas de Mariano Salvador Maella, entre otros autores.
El monumento depende de Patrimonio Nacional, el organismo estatal que gestiona los bienes del Estado al servicio de la Corona.
En el año 2001 fue catalogado como Patrimonio de la Humanidad, junto con otros recintos histórico-artísticos de la localidad, inscritos en la lista de la Unesco con el nombre de Paisaje cultural de Aranjuez.
Está permitida su visita, a partir de horarios establecidos.
En el año 2001 fue catalogado como Patrimonio de la Humanidad, junto con otros recintos histórico-artísticos de la localidad, inscritos en la lista de la Unesco con el nombre de Paisaje cultural de Aranjuez.
Está permitida su visita, a partir de horarios establecidos.
Muy cerca del embarcadero se sitúa el Museo de las Falúas, donde se pueden ver las lujosas embarcaciones que navegaron por el Tajo y que pertenecieron a Carlos IV, Fernando VII o Alfonso XII.
6. Museo de las Falúas Reales
La colección de falúas, o embarcaciones fluviales de recreo, tiene una importancia extraordinaria tanto por la calidad de sus piezas como por la coherencia y singularidad del conjunto.
En la actualidad se halla expuesta en el Museo de Falúas Reales de Aranjuez, un edificio construido en 1963-1964 en el Jardín del Príncipe en las cercanías del Embarcadero Real y sus pabellones.
Desde finales del siglo XIX la colección ya tuvo un uso museístico al abrirse al público en la antigua Casa de Marinos de la margen derecha del río Tajo.
LAS FALUAS
La colección está compuesta por cuarenta objetos, seis de los cuales son embarcaciones y el resto mastiletes, maquetas y otros elementos relacionados con las aficiones náuticas de los reyes de España.
Ese museo monográfico se presenta como un espacio divulgativo que rememora los fastos cortesanos en los ríos y estanques de los Sitios Reales del Buen Retiro de Madrid, La Granja de San Ildefonso y, sobre todo, de Aranjuez.
En 1789 siendo ya monarca ordenó el traslado de unas fragatas al Mar de Ontígola, a más dos kilómetros de Aranjuez, para poder navegar en las tranquilas aguas de esa laguna artificial formada en tiempos de Felipe II.
La embarcación más antigua y espectacular es la góndola dorada encargada en Nápoles por Carlos II en 1683, para su uso en el estanque del Buen Retiro madrileño. En 1724 fue trasladada a La Granja de San Ildefonso por orden de Luis I y en 1966 se incorporó al nuevo Museo de Falúas Reales de Aranjuez. Cronológicamente le sigue la falúa de Carlos IV, construida en Cartagena a comienzos del siglo XIX, pintada con motivos heráldicos.
Del reinado de Fernando VII data la falúa con delfines entrelazados en la proa y el escudo real laureado en la popa, así como el pabellón adornado con mariposas y guirnaldas. Aunque fue empleada en la década de 1830 por María Cristina de Borbón, cuarta y última esposa de Fernando VII, esta pequeña embarcación había sido construida para la segunda, María Isabel de Braganza.
Al reinado de Isabel II corresponde la canoa en madera de caoba con refuerzos de bronce dorado, construida en Ferrol en 1859. Sería empleada por su hijo Alfonso XII en la “REAL CASA DE CAMPO / AÑO 1881”, según reza la chapa de bronce en la popa.
También de Isabel II es la embarcación de cabotaje obra de José Tuduri de la Torre, dedicada por “MAHON A SU REINA”, que tiene el escudo de la ciudad en la popa.
Con tracción de catorce remos, el pabellón está engalanado con damasco amarillo, al igual que el asiento en capitoné, cuyo respaldo tiene como copete los Dos Mundos con las Columnas de Hércules y el Plus Ultra, bajo corona real.
Finalmente, se expone la falúa de Alfonso XII, regalo de la ciudad de Ferrol en 1879. Con once metros de eslora y catorce remos, fue empleada por el monarca en sus estancias veraniegas en San Sebastián.
7. Jardín de la Isla
Para acceder a la isla es más evocador bajar por el puente escalonado, que se une al bello conjunto
barroco de la fuente de Hércules, con sus estanques y pasarelas del siglo XVII.
La iniciativa de convertir el vergel de la isla en un jardín italoflamenco arranca de la idea de Carlos V de elegir Aranjuez "para en él fundar una casa de campo para su recreo", según una Real Cédula de 30 de abril de 1544, ampliando otra ocho años anterior.
Contó para ello con Gaspar de Vega y Alonso de Covarrubias, que en 1550 estableció la forma en que habían de ser dispuestas las calles y cruceros de los Jardines y las puertas de mármol de la huerta.
La fachada norte del Palacio está separada del Jardín de la Isla por una ría enlosada, que se ensancha en abanico formando la Cascada llamada de las Castañuelas, obra de Bonavía.

La ría se puede atravesar por dos puentes - uno, con escalones, data de 1733 - el otro surgió en principio como simple boca de las compuertas que dan entrada al agua del Tajo, pero luego se habilitó encima una rampa para que entrase en el Jardín la carriola de la Reina, tal y como aparece en los cuadros de Battaglioli que muestran las fiestas de Farinelli.

Para acceder a la isla es más evocador bajar por el puente escalonado, que se une al bello conjunto
barroco de la fuente de Hércules, con sus estanques y pasarelas del siglo XVII.
El Jardín de la isla adquirió su estructura definitiva en 1 560, merced a Felipe II y Juan Bautista de Toledo.
La iniciativa de convertir el vergel de la isla en un jardín italoflamenco arranca de la idea de Carlos V de elegir Aranjuez "para en él fundar una casa de campo para su recreo", según una Real Cédula de 30 de abril de 1544, ampliando otra ocho años anterior.
Pero fue su hijo quien durante su etapa de gobierno, siendo Príncipe, emprendió las obras de ordenación en agricultura, riegos y calles.
Para la Isla la fase verdaderamente decisiva comienza en 1560 con la llegada del arquitecto Juan Bautista de Toledo.
En enero de 1561 el Rey dio la orden de trazar el Jardín. Poco después llegarían algunas especies de Flandes y Francia, y frutales de Andalucía y Valencia.
En enero de 1561 el Rey dio la orden de trazar el Jardín. Poco después llegarían algunas especies de Flandes y Francia, y frutales de Andalucía y Valencia.
Entre los numerosos jardineros no españoles que trabajaron entonces destacan el flamenco Juan Hoivecq y el italiano Jerónimo de Algora, que había hecho con Toledo el parque de Castel Nuovo en Nápoles.
Aunque Hoivecq quería que el Jardín estuviese dividido en cuadros, Juan Bautista de Toledo lo organizó a base de rectángulos a lo largo del eje central, "porque siendo el jardín tan largo y poco ancho son más proporcionados los cuadros como están trazados que no cuadrados".
Durante 1561 debió llevarse a cabo el allanamiento y preparación del terreno y a mediados de año se empezaron las paredes de cerramiento, que nunca fueron tapias altas, sino "diques" o muros de contención sobre el cauce.
Así, el Jardín quedaba a salvo de las crecidas del agua que lo rodea, lo cual es su característica más destacada y que le da nombre.
Así, el Jardín quedaba a salvo de las crecidas del agua que lo rodea, lo cual es su característica más destacada y que le da nombre.
En enero de 1562 ya se habían acabado de allanar las calles del Jardín, y durante 1563 las obras avanzaron con fuerza, a la vez que se hacía el "Mar de Ontígola" que alimentaría las fuentes.
Al año siguiente todo estaba ya plantado, se solaban de ladrillo las plazuelas del Jardín y se traían de Italia los mármoles labrados para las fuentes, cuya disposición ha de deberse a Toledo, aunque no se empezaran a colocar sino después de su muerte.

La Fuente de Hércules, la Fuente del reloj, la Fuente de Apolo, la Fuente del Niño de la Espina,la Fuente de Venus, Fuente de Baco y la Fuente de Neptuno son algunas de las esculturas que podemos encontrar en su interior.
Para pasear por la Isla, al menos por primera vez, conviene seguir la avenida central y luego volver por la terraza sobre la ría- el plano en el interior de la solapa permite ir identificando las fuentes.
8. Jardín del Parterre
Es el primer Jardín que nos encontramos a la entrada de Aranjuez y supone la antesala a todo lo quque nos vamos a encontrar.
Bajo la galería que une la residencia real con la Casa de Oficios se abre una pequeña puerta que da acceso al Parterre.
Ante la fachada meridional de Palacio, la única que se remonta al siglo XVI, está el Jardín del Rey, que es un ejemplo modelo del "Jardín cerrado,, adornado con estatuas, síntesis de la herencia mudéjar y de las influencias renacentistas italianas, tan usual en los Palacios Reales españoles de los Austrias.
Concebido por Juan Bautista de Toledo, fue llevado a cabo por Juan de Herrera a partir de 1 577, y se terminó en 1 582, cuando quedó colocada la fuente de jaspe verde labrada por Roque Solario, y restaurada, como todo este Jardín, en 1986.
Los caminos, que originalmente estaban solados con ladrillo, fueron empedrados, tal y como ahora se ve, en 1622, cuando Felipe IV dio a este Jardín un carácter distinto mediante la sustitución de parte de las "grutas" por hornacinas, y la colocación de un conjunto de esculturas que lo dotaban de un significado político-dinástico.

En su interior podremos ver la Fuente de Hércules y Anteo, la Fuente de Ceres y de las Nereidas incluso el pequeño Jardín del Rey y de la Reina.
Realizamos salidas todos los sábados, domingos y festivos nacionales. Además se puede contratar en cualquier otro horario o fecha para un grupo.
Salidas desde el embarcadero del Club de Piragüismo Aranjuez. Carretera de Madrid Nº2 (Entrada de Aranjuez, frente al Restaurante Rana Verde y al lado de los Salones Delicias)
Los horarios son:
Jardín de la Isla y Jardín del Parterre: 13:30 (90 minutos)
Jardín del Príncipe: 16:00 (90 minutos)
Recuerda que si compras el ticket del barco se incluye de regalo una de estas 2 visitas.
Existen precios especiales para grupos (20 personas o más)
Horarios de funcionamiento de las Fuentes
Jardín del Parterre y Jardín de la Isla: S, D y festivos de 11 a 18h.
Jardín del Príncipe: S, D y festivos: Fuente del Cisne: 12h30 a 12h40 y de 16h30 a 16h40 y Fuente de Narciso: 12h a 12h10 y de 16h a 16h10
Con el mismo refinamiento y cuidado con el que fue construido el Palacio Real, fueron trazados, construidos y decorados durante dos siglos los jardines que lo rodean. Siguiendo el modelo de Versallesse quiso controlar la naturaleza para convertir el jardín en una sala más del palacio.
El Jardín de la Islacuenta con un espléndido arbolado, grandes avenidas y numerosas fuentes de piedra y mármol dedicadas a personajes y escenas de la mitología griega.
Al otro lado nos encontramos con el Jardín del Parterre, en el que destaca una gran profusión y variedad de flores.
El Jardín del Príncipe –el más grande de todos– cuenta con anchos paseos y especies de árboles muy variadas. Todos ellos cuentan confuentes monumentales con espectaculares juegos de agua (consultar horarios).
El Jardín del Príncipe –el más grande de todos– cuenta con anchos paseos y especies de árboles muy variadas. Todos ellos cuentan confuentes monumentales con espectaculares juegos de agua (consultar horarios).
9. Casco Antiguo de Aranjuez
El casco antiguo de Aranjuez ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico por tratarse de una singular muestra de urbanismo barroco.
Diseñado en 1747 por Giacomo Bonavia, desde el momento mismo de su nacimiento como villa, estuvo concebido como un espacio noble donde tuvieran cabida edificios de digna construcción.
Diseñado en 1747 por Giacomo Bonavia, desde el momento mismo de su nacimiento como villa, estuvo concebido como un espacio noble donde tuvieran cabida edificios de digna construcción.
Grandes casas con patios, cúpulas, palacetes, conventos, balcones, plazas, calles espaciosas... son testimonio de cuatro siglos de historia.
10. Plaza de la Mariblanca

La plaza de San Antonio, también conocida como Plazuela de la Mariblanca, es un espacio público situado en medio de la antigua carretera Nacional IV, al lado del Patio de Oficios, y en pleno centro Histórico de Aranjuez.
Se la conoce también como «de la Mariblanca» debido al conjunto escultórico conocido como la fuente de la Mariblanca (cuyo nombre real es la fuente de Venus) que decora el extremo norte de la plaza.
A la plaza dan la Casa de Caballeros y Oficios, la iglesia de San Antonio, la Casa de Infantes y el jardín de Isabel II.
Hacia 1752, la plaza tenía otra fuente llamada el fuente del Rey, obra de Juan Domingo Olivieri, con una imagen del rey Fernando VI mirando al puente, pero en 1760 el rey Carlos III, ordenó retirar la estatua, y dos años más tarde se colocó la actual fuente de Venus, obra de Juan Reyna.

11. Patio de Oficios
Ocupan el lateral occidental de la plaza de la Mariblanca a la que abren sus bellos soportales. Su función era la del mantenimiento y administración del Real Sitio y alojamientos del séquito, especiales en época de jornadas Reales.
Ambas construcciones aparecen unificadas hacia la Plaza de San Antonio, aunque responde a distintos momentos.
La Casa de Oficios fue proyectada por Juan de Herrera (1854), prolongándose su construcción durante el siglo XVII.
Estas fases no concluyen hasta el siglo XVIII, periodo en el que da fin a la Casa de Caballeros (1767), sobre los planos de Gómez de Mora (siglo XVIII), bajo la dirección de Santiago Bonavia y sus sucesores Marquet y Serrano.
12. Palacio Silvela

Arquitecto(s) José Segundo de Lema
El palacio Silvela es un edificio civil ubicado en el antiguo Jardín de Plantas Medicinales de la Familia Real, hoy "Jardín Silvela", frente al Palacio Real de Aranjuez.
El palacio fue mandado construir por el rey consorte Francisco de Asís de Borbón, marido de Isabel II, en 1860 para su primo el príncipe Adalberto de Baviera. Por eso también ha recibido el nombre de "Palacio Baviera".
El encargo lo recibió el arquitecto palatino José Segundo de Lema, que diseñó un proyecto de pintoresco estilo que podría encuadrarse dentro del llamado “racionalismo neogótico” propiciado por el arquitecto francés Viollet-le-Duc, caracterizado por mostrar los materiales en su aspecto natural para expresar con sinceridad su finalidad constructiva. La fachada es de ladrillo de Valladolid y piedra de Colmenar.
Al ser destronada Isabel II en 1868 y exiliada la Familia Real, nunca pudo servir de residencia al príncipe de Baviera.
El palacio pasó entonces a manos de don Manuel Silvela, ministro de la Corona, permaneciendo largos años como propiedad de esta familia que le ha dado el nombre que ha llegado hasta nuestros días.
Durante la Guerra Civil, el palacete es ocupado por las checas. En ese periodo, desaparece una importante biblioteca y pinacoteca, así como objetos y muebles de gran valor.
Terminada la guerra, se convierte en la residencia del general que manda los Regimientos de Almansa y Pavía, permaneciendo así hasta el año 1962, en que el palacio está prácticamente en ruinas. En 1966 sufre un incendio, quemándose sus artísticos artesonados, y queda totalmente en ruinas.
A principios de la década de los años 80 se inicia su restauración por D. José Pérez Mardones con fondos propios. Se restaura a semejanza del antiguo palacio antes de su incendio.
Actualmente sigue en propiedad de la familia Mardones.
Julián (Juli para los amigos) y Marimar tras 25 años juntos, con trabajo, pasión y deseo de llegar, han conseguido su sueño.
Dirección: Almíbar, 42. Aranjuez.
13. De Tapas por Aranjuez
Aguatinta
Dirección: Almíbar, 5. Aranjuez. Madrid.
Metro / Zona: N- IV / A 47 km de Madrid. / Jardín de la Princesita Isabel.
Teléfono: 91 018 26 61.
Horario: De 13:00 a 16:00 y de 20:00 a 24:00 h.
Cierra: Domingos noche y Lunes.
Precio: 45 €
Julián (Juli para los amigos) y Marimar tras 25 años juntos, con trabajo, pasión y deseo de llegar, han conseguido su sueño.
Y todo esto, desde que tenían el Kiosko Juli, y en Aranjuez, con uno de los mejores niveles gastronómicos de la provincia. Es el más concurrido a diario.
En su barra toman vinos los lugareños y hacen comidas informales los que allí trabajan o están de paso. Tapas y raciones que programan en la pizarra según mercado y temporada.
El restaurante queda para los mismos clientes, pero sentados, en un local moderno, luminoso y con una decoración contemporánea.
El local perteneció a la casa de Alba y en un salón tiene unas aguatintas de Goya (de ahí el nombre). Aquí vivía cuando iba a visitar a la corte. Además, un atractivo y resguardado patio interior, muy solicitado en buen tiempo. Otro comedor junto al patio y el salón de las aguatintas que en un futuro podrá ser un lugar de eventos.
La cocina honesta, sencilla y autodidacta de Marimar, y su punto supremo.
Siempre suelen tener marisco de diferente naturaleza, en nuestro caso comimos unos estupendos mejillones escabechados en la casa, seguido por unos ricos camarones pasados por la sartén y las buenas navajas de buceo, ambos clavados de punto.
Delicados los guisantes de lágrima de Llavaneres con jamón y huevo escalfado. Correcta la trilogía de atún rojo en tartar, tataki y sashimi de ventresca. Sedoso y auténtico el pilpil de cocochas de merluza, almejas y espárragos verdes.
Atelier Casa José
Dirección: Abastos 32, Aranjuez, Madrid.
Metro / Zona: A-IV / A 47 km de Madrid.
Teléfono: 91 891 14 88. 91 892 02 04.
Horario: De 13:45 a 15:30 y de 21:00 a 23:30 h.
Cierra: Domingos noche y lunes. Semana Santa y Agosto.
Precio: 45 €
Comentario: Fernando del Cerro y su cocina de verduras le han llevado a la primera división de la cocina española e internacional, también asesora un restaurante fuera de España.
La consecuencia es sencilla, Casa José en Aranjuez se llena los fines de semana adeptos y nuevos clientes que van a probar su admiradas elaboraciones de verduras, algunas con registros sápidos y de texturas únicos.
En la planta baja, tenían una tradicional barra que fue todo un referente en la historia del aperitivo y desayuno de Aranjuez.
Hasta hace unos meses (comienzos de 2016), su barra que era básicamente para la espera de las mesas del restaurante y algún picoteo informal, se ha convertido en una propuesta diferenciada.
Especialidades: En esta cocina nodriza Fernando ha puesto a una pareja de jóvenes cocineros: Ana Serena y Daniel Moya, siempre bajo su supervisión. Propuestas diferentes, informales y sugerentes, pero con todo su sabor y autenticidad, claro.
Así, la sardina marinada en ponzu con mantequilla de algas y cebolla caramelizada está estupenda. El tartar de mero con tosta de carasatu, rico y bien acabado.
En los níscalos con pak choi y huevo mollet; y la patata rattè en ají de remolacha y pez mantequilla, se descubren dos platos con los valores de la casa madre y todos los matices de su nivel con las verduras. Muy bueno el kebab de picantón y salsa griega de pepino.
Muy sabrosa e intensa la morcilla de hígado de pichón, trigo sarraceno y kale frito. De postre no hay que perderse la tierra de chocolate con cítricos, hinojo y jícama.
Casa Pablo
Dirección: Almíbar, 42. Aranjuez.
Metro / Zona: A-4 / A 48 Km. de Madrid.
Teléfono: 91 891 14 51.
Horario: De 13:30 a 16:30 y de 21:00 a 24:00 h.
Cierra: Agosto.
Precio:45 €.
Comentario: Restaurante y taberna taurina tradicional inaugurada en 1941.
Toda una institución en Aranjuez, como el propio Pablo Guzmán, que lleva la vida entera atendiendo a sus clientes, porque a sus ochenta y muchos años, todavía anda por el local saludando a los clientes.
Hoy ya tres generaciones dando de comer a madrileños, cocina tradicional basado en el recetario clásico popular.
No obstante, su hijo Guzmán, hace unos años cogió las riendas de la cocina y aunque siguen las especialidades de la casa de toda la vida, también ha añadido alguna novedad. Buena barra para comer mariscos, embutidos y jamones ibéricos.
Especialidades: como decíamos, Sergio Guzmán, hijo de Pablo, se ha hecho cargo de la cocina y ha comenzado a elaborar otros platos de nueva creación como: la ensalada de perdiz escabechada, el estupendo taco de bacalao con sus propio callos y migas crujientes, verdinas con chipirones, patatas con níscalos.
También platos tradicionales como: los caracoles de la casa, almejas marinera, pisto con escabeche, mollejas con habas, perdiz guisada, callos a la madrileña y buena carne roja.
14. Fiestas, ferias y festivales
En mayo se celebra la Feria de Artesanía "Alfaranjuez", así como el Festival de Música Tradicional "Aranjuez Folk". También tiene lugar en este mes la Feria del Coche Usado y Seminuevo.
15 de mayo, día de San Isidro Labrador, romería en la cercana pedanía del Real Cortijo de San Isidro.
30 de mayo, día de San Fernando, patrón de Aranjuez.
Entre mayo y junio se celebra el Festival de Música Antigua de Aranjuez.
En junio tiene lugar la Feria del Libro de Aranjuez, en contrapartida con la Feria del Libro Usado y de Ocasión, que se celebra en septiembre.
Primera semana de septiembre, Fiestas del Motín de Aranjuez, declaradas de interés turístico nacional.
En los alrededores, podemos ver
15. Mar de Ontígola

ACCESO
En coche
Desde Madrid, tomar la salida 37 desde la A-4 Córdoba hacia M-350. Antes de la glorieta, girar a la derecha dirección Aranjuez. Continuar por la M-350 hasta llegar a Aranjuez. Girar a la derecha por la Avenida de Palacio hasta llegar a la Calle de la Florida.
Continuar recto hasta la glorieta y tomar la segunda salida por la Avenida del Deleite. En la glorieta, continuar recto hasta girar a la derecha por el Camino de Ontígola. Continuar por TO-2542 hasta llegar al humedal.
En tren
Línea C-3 destino Aranjuez. Tiempo estimado de 45 minutos. Salir de la estación y girar a la izquierda en la Carretera de Toledo. A unos metros, girar a la derecha por la Calle Jacinto Guerrero. En la Calle Oropéndola, girar a la derecha en Cuesta de las Perdices hasta llegar al Paseo del Deleite. En la glorieta, girar a la izquierda cruzando el estadio de fútbol hasta llegar a la Glorieta de Le Pecq. Tomar la Calle Montecillo hasta el Camino del Mar Chico y continuar hasta la entrada al humedal.
DESCRIPCIÓN
El Mar de Ontígola forma parte de la Reserva Natural de “El Regajal – Mar de Ontígola” protegida desde el año 1994 gracias a su diversidad ecológica y a su excepcional riqueza florística, avifaunística y entomológica. Posteriormente, se incorporó a la Red Natura 2000 como ZEPA (Carrizales y Sotos de Aranjuez) y LIC (Vegas, cuestas y páramos del Sureste de Madrid).
El humedal constituye un hito natural fundamental del sur madrileño por tratarse de un punto estratégico que ejerce como vínculo entre los páramos castellanos y la vega ribereña del río Tajo. La formación del Mar de Ontígola se debe a causas históricas.
En el año 1552, Felipe II ordenó la modificación y ampliación de la balsa que regulaba las aguas del Arroyo de Ontígola que regaban las huertas y jardines reales a través de la construcción de la Presa de Ontígola, contando con la participación de ilustres personajes como Juan Bautista de Toledo y Juan de Herrera.
Su finalización en el año 1572 con piedra de Colmenar de Oreja supuso un hito vanguardista en los campos de la arquitectura y la ingeniería hidráulica por tratarse de la precursora de las modernas presas de contrafuertes del siglo XVI en Europa y América.
Su finalización en el año 1572 con piedra de Colmenar de Oreja supuso un hito vanguardista en los campos de la arquitectura y la ingeniería hidráulica por tratarse de la precursora de las modernas presas de contrafuertes del siglo XVI en Europa y América.

Mar de Ontígola. Fuente: Alberto Villares (SEO-Aranjuez)
Con el paso de los años, el embalse que acogía las jornadas de recreo y disfrute de Austrias y Borbones se naturalizó, convirtiéndose en la actualidad en una joya natural a escasos kilómetros de Aranjuez.

Aguilucho lagunero occidental

En el humedal, domina el carrizal de la vegetación palustre, que impide observar la presa histórica a excepción de un aliviadero y varios contrafuertes, y algunas formaciones de tarayales (Tamarix sp.pl.) cerca de los caminos.
Somormujo lavanco
En cuanto a la fauna, las especies más vistas son las asociadas al bosque mediterráneo, entre las que se encuentra el conejo (Oryctolagus cunniculus), la liebre (Lepus granatensis), la culebra bastarda (Malpolon monspessulamus), la culebra de escalera (Elaphe scalaris), el lagarto ocelado (Lacerta lepida), el erizo (Erinaceus europeus), la musaraña (Crocidura russula), el jabalí (Sus scrofa) o el zorro (Vulpes vulpes).

Mariposa arlequin
Ejemplares como la mariposa arlequín (Zerynthia rumina), la sagarrilla (Coscinia romeii), la niña del astrágalo (Plebejus hespericus), el pavón nocturno (Saturnia pyri), la blanca catalana (Pieris mannii) o la posible desaparecida mariposa espantalobos (Iolana iolas) atestiguan la grandiosidad de un espacio valorado por entomólogos de todo el mundo desde el siglo XVIII en actual declive.
16. y para comer , dentro de la amplia oferta gastronómica, hemos elegiodo tres restaurantes:
Asador EL Corral de la Abuela
Calle de la Reina, nº 2,
28300 Aranjuez, España
+34 918 92 02 37
Almibar
Calle Almibar 138,
28300 Aranjuez, España
+34 918 92 53 02
y algo mas económico
Patio del Mercado
Calle Abastos, 5,
28300 Aranjuez, España
+34 652 34 18 16
17. Otras Rutas cercanas:
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