
Basílica de San Vicente, Avila
Plaza del mercado Grande o de Santa Teresa, Ávila
Ciertamente Avila es una ciudad pequeña, de no mas de 60.000
habitantes y su principal reclamo es la muralla. Pero no nos
confundamos, la muralla no es la única atracción turística que podemos
visitar.
Indice:
-
¿Cómo llegar a Ávila?
- Historia de Ávila
- Puerta de los Leales
- Palacio de los Velada
- Palacio de los Dávila
- Torreón de los Guzmanes
- Iglesia de Santa Teresa
- La Muralla de Ávila
- Catedral de Ávila
- Los Cuatro Postes
- Real Monasterio de Santo Tomás
- Estatua de Santa Teresa y Puerta del Alcazar
- Plaza del Mercado Chico
- Plaza del mercado Grande o de Santa Teresa
- Basílica de San Vicente
- Ermita de la Virgen de Sonsoles
- Capilla de Mosén Rubí
- Iglesia de San Pedro
- Convento del Carmen
- Santo Tomé el Viejo
- Monasterio de la Encarnación
- Iglesia de Santiago
- Ermita de San Segundo
- Iglesia de San Andrés
- Iglesia de San Nicolás
- De Tapas en Avila
- Museos de Ávila
- Ferias y Fiestas
- ¿Qué y donde comer en Ávila?
- Jornadas Medievales, la gran fiesta de Ávila
- Otras Rutas Cercanas
Salvo que vengáis de alguna ciudad con conexión directa en tren, las
conexiones a Ávila no son muy buenas ya que no tiene aeropuerto propio. La
opción más rápida y económica es volar hasta Madrid y desde ahí coger el
tren hacia Ávila.
Desde el aeropuerto Madrid-Barajas debéis dirigiros a la estación de tren de Chamartin para tomar desde allí el tren hacia Ávila. La duración del trayecto oscila entre 1h30min a 2h en función de las paradas que realice. Los trenes salen con bastante frecuencia.
Encontraréis todos los horarios y precios en la página oficial de renfe.
A nosotros los billetes de ida y vuelta nos costaron 19,60 € por persona
y el trayecto nos llevó una hora y media.
Al abrigo de la Sierra de Gredos se alza Ávila, declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad. Tras las murallas de esta capital castellano-leonesa se esconde un valioso conjunto de iglesias y palacios renacentistas, testigo del esplendor pasado de la urbe como centro de producción textil.
Su condición de cuna de Santa Teresa de Jesús ha dejado en toda la ciudad,
tanto dentro como fuera del recinto amurallado, un gran número de
edificios religiosos vinculados a la vida de la mística.
La Comisión Europea ha concedido a Ávila el premio de 2010 a la Ciudad
Accesible.
Los excelentes asados y el famoso Chuletón de ternera de Ávila son sólo una parte del rico recetario de la provincia, sin olvidar, en el apartado de repostería, las célebres yemas de Santa Teresa.
Los excelentes asados y el famoso Chuletón de ternera de Ávila son sólo una parte del rico recetario de la provincia, sin olvidar, en el apartado de repostería, las célebres yemas de Santa Teresa.

Con la llegada de los romanos en el s. III a. C. se procedió a la construcción de la primera muralla, lo que convirtió a Ávila en un importante enclave defensivo.
Tras varios siglos de decadencia, en el siglo XI la ciudad fue repoblada y
reconstruida. Según cuenta la tradición, Raimundo de Borgoña, yerno del
rey Alfonso VI, fue el encargado de supervisar la reconstrucción de la
muralla sobre las ruinas de la antigua fortificación romana.
La época de mayor esplendor de esta ciudad llegaría en el siglo XVI,
momento en que la manufactura lanar permitió el despegue económico de la
urbe. Durante ese periodo de bonanza se construyeron en la ciudad
numerosos edificios civiles y religiosos que aún perviven en el casco
histórico de la localidad
.El símbolo de la ciudad es la muralla, uno de los recintos amurallados
medievales mejor conservados de Europa.
Sus dos kilómetros y medio de perímetro se encuentran jalonados por casi 2.500 almenas, un centenar de torres, seis puertas y tres portillos.
Sus dos kilómetros y medio de perímetro se encuentran jalonados por casi 2.500 almenas, un centenar de torres, seis puertas y tres portillos.
3. Puerta de los Leales
Una de las entradas principales a la ciudad antigua, desemboca directamente en la Catedral, templo con aspecto de fortaleza que fue erigido entre los siglos XII y XIV y cuyo ábside, denominado cimborrio, está adosado a la muralla constituyendo el cubo defensivo más voluminoso del baluarte.
Mientras que en su fachada se superponen elementos góticos y barrocos,
en el interior destacan los minuciosos relieves del trascoro y el
sepulcro de El Tostado, realizado en alabastro.
El Museo Diocesano acoge diversas obras de arte, entre las
que destaca una monumental custodia procesional, obra de Juan de Arfe.
Intramuros, se entremezclan rincones de aspecto medieval, como la
Plaza de los Dávila, con más de una docena de casas renacentistas
de noble linaje, entre las que se pueden mencionar la mansión de los
Velada, el palacio de los Valderrábano o el de Núñez Vela.
Justo a uno de los extremos de la catedral está el palacio de los
Velada, hoy en día hotel de lujo y comúnmente utilizado para celebrar
bodas.
Palacio de los Velada
En su interior se haya un bonito patio con techo acristalado donde podremos tomarnos un café sin estar alojados en el hotel. Otro palacio cercano y también hotel es el palacio de Valderrábanos.
Palacio de los Velada
En su interior se haya un bonito patio con techo acristalado donde podremos tomarnos un café sin estar alojados en el hotel. Otro palacio cercano y también hotel es el palacio de Valderrábanos.
Pero la construcción más sorprendente del entorno es el
5. Palacio de los Dávila.
Se trata de una recia fortaleza formada en realidad por cuatro casas, la más antigua de ellas del siglo XIII.
El conjunto destaca por sus almenas y por una famosa ventana de origen renacentista.
Muy cerca se encuentra el Torreón de los Guzmanes, levantado en el siglo XVI y que actualmente alberga la Diputación Provincial.
5. Palacio de los Dávila.
Se trata de una recia fortaleza formada en realidad por cuatro casas, la más antigua de ellas del siglo XIII.
El conjunto destaca por sus almenas y por una famosa ventana de origen renacentista.
Muy cerca se encuentra el Torreón de los Guzmanes, levantado en el siglo XVI y que actualmente alberga la Diputación Provincial.
6. Torreón de los Guzmanes
Sede de la diputación provincial de Ávila, el torreón de los Guzmanes es
un edificio del siglo XVI y donde tuvo residencia el rey Alfonso XII de
manera temporal.
Es fácilmente localizable al estar de camino entre el mercado Chico y el convento de Santa Teresa.
Es fácilmente localizable al estar de camino entre el mercado Chico y el convento de Santa Teresa.
Son sólo algunas de las más de cien casonas y residencias palaciegas que
existieron en Ávila entre los siglos XVI y XVIII, hecho que queda
reflejado en el nombre completo de la ciudad, denominada Ávila de los
Caballeros.
Este hecho se pone de relieve en el gran número de iglesias y conventos que se encuentran dispersos por toda la ciudad.
En la plaza de La Santa se encuentra el convento homónimo, construido en 1636 sobre la casa natal de Santa Teresa de Jesús.
Si en tu visita quieres hacer un Tour, o necesitas comprar alguna entrada para Museo o actividad, en este enlace te lo solucionan aquí.
7. Iglesia de Santa Teresa
El edificio, de portada barroca, alberga un importante conjunto de tallas
realizadas por el escultor Gregorio Fernández, además de una capilla
dedicada a la Santa que destaca por su profusa ornamentación.
En el interior existe un huerto en el que, según la tradición, jugó de niña la mística abulense.
En el interior existe un huerto en el que, según la tradición, jugó de niña la mística abulense.
Lugares como la Catedral, el monasterio de Santo Tomás, la ermita de Sonsoles, la plaza del mercado Chico o el Convento de Santa Teresa son buenas excusas para visitar Ávila.
Mapa de Ávila

Sin mas preámbulos detallamos los lugares que ver en Ávila procurarando no dejar lo imprescindible.
8. La Muralla de Ávila
La muralla de Ávila es sin duda el mayor reclamo turístico de la ciudad
siendo considerada como la mejor que hay en España. Lo curioso es que
cientos de años atrás estuvo a punto de ser derruida al no tener sentido
alguno para los habitantes de aquella época.
Se inició su construcción a finales del siglo xi a instancias del rey
Alfonso VI de León, el cual encargó al conde Raimundo de Borgoña, marido
de su hija la infanta doña Urraca, repoblar los territorios llamados «de
nadie» y fortificar las ciudades de Ávila, Segovia, y Salamanca. Casandro
Romano y Florín de Pituenga se ocuparon de la dirección de las obras que,
según la historiografía tradicional, duraron nueve años, de 1090 a 1099.
En 1596, el rey Felipe II de España realizó obras de restauración en la
muralla.
Tan escasa duración de las obras no resulta, no obstante, creíble y
numerosos investigadores han postulado diversas teorías sobre una
edificación anterior, probablemente el trazado de un campamento militar
romano, con el cual coincide en forma y proporciones; en cualquier caso,
la muralla romana original tendría un perímetro inferior al actual, dado
que la capital del centro y noroeste peninsular era
León,
con una muralla de 1780 m, y en consecuencia la de Ávila no sería
mayor.
En apoyo de esta tesis se citan las numerosas piezas reutilizadas que
proceden de un cementerio romano, en el lienzo -parte exterior que
comprende el volumen de la muralla- del lado este: lápidas, cistas y
cupas, así como otros hallazgos de las últimas excavaciones. Rodríguez
Almeida ya demostró, entre otras evidencias, la existencia de dos torres
originales de la primitiva muralla romana, empotradas en el cuerpo de la
muralla actual, levantadas por los repobladores medievales en el Arco de
San Vicente.
Puerta del Alcázar en 1864, antes de la restauración de Repullés.
En el siglo xiv se llevaron a cabo reformas encaminadas a aumentar la
eficacia defensiva de los muros. Se arreglaron las puertas y se levantaron
los lienzos de algunos lugares hasta la altura de las torres (alcanzando
los 15 metros).
También se construyó (en la parte de la calle de San Segundo) una segunda
barrera de menor tamaño que hacía las veces de barbacana en la cual se
dispusieron troneras para armas de fuego.1
En 1591 se construyeron las nuevas carnicerías entre cubos de la parte
sur, al lado del cimorro de la catedral. Unos años antes, en 1548 se
ordenó cerrar el Portilo del Obispo por diversos alborotos ocurridos pero
poco después se construyó una nueva puerta a su lado.
En la parte de la muralla que coincide con el Palacio Episcopal (compuesto
por dos palacios, el de Navamorcuende y el de Villatoro) carece de adarve
(Camino situado en lo alto de una muralla, detrás de las almenas) ya que
vaciaron el muro y recrecieron el lienzo.
Se abrieron varias ventanas en este último que en 1507 se tapiaron por
orden de la reina Juana I de Castilla. Años más tarde, en 1542 el señor de
Villafranca, como revancha, abrió una nueva ventana en la que reza la
leyenda Donde una puerta se cierra otra se abrey, sobre la puerta del
Rastro, abrió un bonito mirador.
Las murallas han sufrido varias modificaciones a lo largo de su historia.
De los trabajos de mantenimiento rutinarios que se cubrían con el reparo
de los muros a los trabajos de restauración que se emprendieron a
principios del siglo xx.
En 1907 bajo la dirección de Repullés se llevaron a cabo varios
trabajos que cambiaron la fisonomía de algunos puntos del monumento. No
fue hasta 1982 cuando se pudo dejar la muralla libre de casas adosadas.
Su finalidad era la de proteger, pero una vez cumplido este cometido se pensó en desmantelarla. Cosas de no existir turismo durante esos años….

El recorrido esta dividido en dos tramos.
Uno de aproximadamente 300 metros cuyo acceso es por la puerta del Alcazar. El otro de algo mas de 1 kilómetro empieza en la puerta de acceso a la catedral.
Si tenemos buenas piernas os aconsejo darla una vuelta por completo y
encontrareis rincones y puertas realmente bellas y poco transitadas por el
turismo.
El coste de la entrada es de 5 Euros de 10:00 a 18:00. En verano se amplía
el horario de cierre hasta las 21:00 y es gratis para residentes. Para
entrar se disponen de tres accesos diferentes.
9. Catedral de Ávila

Otro de los monumentos principales de la ciudad y tan común en cada una de
las capitales de Castilla y León, la catedral.

Del siglo XIII son el primer cuerpo de las torres y las naves y del xiv el
segundo cuerpo de las torres (una de ellas inacabada), el claustro, las
bóvedas y los arbotantes.
Ya en el siglo xv se terminan todas las obras de la catedral y, en 1475,
Juan Guas construye el reloj mecánico, además de trasladar la primitiva
portada occidental al lado norte.
Detalle del pórtico.

A lo largo de los siglos fueron construyendo diversas capillas, como la de
San Segundo y Los Velada, en el siglo xvi.
Otra obra importante de Juan Rodríguez en colaboración con Lucas Giraldo
es el altar de Santa Catalina.
El altar mayor lo comienza, en 1502, Pedro Berruguete, autor de las ocho
tablas de la predela: evangelistas, doctores de la iglesia, la Flagelación
y la Oración en el Huerto, probablemente terminada por Santa Cruz, artista
que continuaría la obra con las tablas de la Crucifixión, Resurrección y
Epifanía. Finalmente termina el retablo Juan de Borgoña.
La de Ávila quizás no sea la mas espectacular pero tiene algo que el resto
no tiene y es que se la considera como la primera catedral gótica del país

Pórtico de la Catedral de Ávila
El precio de la entrada es de 5 Euros. Abre entre las 10:30 y las 11:30
dependiendo del día y suele cerrar entre las 17:30 y las 19:00 (solo
sábados).
10. Los Cuatro Postes
Es el mirador mas famoso de la ciudad y donde se rumorea que Santa Teresa
sacudió sus zapatillas y dijo que no volvería jamás.
Leyendas a parte, es un lugar que tenemos que visitar si o si tanto de día como de noche.
Leyendas a parte, es un lugar que tenemos que visitar si o si tanto de día como de noche.

Mucha gente llega al mirador en coche pero este es fácilmente accesible a pie desde un puente que cruza el río Adaja justo detrás del palacio de Congresos.
11. Real Monasterio de Santo Tomás
Buenos recuerdos me trae este lugar al ser la iglesia donde contraje
matrimonio. Historias personales a parte, creo que es uno de los grandes
desconocidos de Ávila, debido en su mayor parte al estar fuera del casco
antiguo de la ciudad.
Este monasterio fue construido a finales del siglo XV en estilo gótico. Su
fundación se debe al tesorero de los Reyes Católicos, Hernán Núñez de
Arnalte, quien otorgó poder a favor de su esposa, María Dávila, y a que fray
Tomás de Torquemada, actuasen en su nombre para la fundación de un convento
de dominicos en Ávila en honor de Santo Tomás de Aquino.
Esta Iglesia se integra dentro de un Monasterio, que a su vez fue Palacio Real para los Reyes Católicos. La iglesia presenta una planta de cruz latina con cinco tramos coronada por una bóveda estrellada. A mitad de la fachada se sitúa un gran rosetón que da luz al coro y la iglesia.
Un poco más arriba, preside el escudo de los Reyes Católicos
sostenido por un águila, que representa San Juan Evangelista.
La nave principal tiene unas medidas de 53 metros de largo por 10,50 de ancho y el crucero mide 28,80 metros de largo por 10,30 de ancho.
Interior de la Iglesia del Real Monasterio de Santo Tomás
El complejo monástico presenta tres patios; el claustro asociado a la Iglesia tiene unas medidas de 19,40 por 20,90 metros con dos plantas. Consta de 18 arcos, con dos puertas de acceso en su parte interior, y de 38 arcos polilobulados en su parte superior.
El retablo mayor contiene pinturas de Pedro Berruguete, (1450-1503) que ilustra 19 pinturas colocadas en esta magnífica obra de estilo gótico de 21 metros de alto.
El retablo está estructurado en tres partes, que contienen cinco grandes
tablas relativas a diversos episodios de la vida de Santo Tomás de Aquino.
Fue residencia de verano de los Reyes Católicos.
Tumba del Príncipe Juan, hijo de los Reyes Católicos en el Monasterio de Santo Tomás
En lugar preferente junto al altar mayor, se halla el sepulcro o sarcófago del príncipe Juan, el único hijo varón de los Reyes Católicos, que murió prematuramente antes de llegar al trono.
La obra escultórica renacentista, en mármol de Carrara, es del autor italiano Domenico Fancelli. (1469-1519).
Esta Iglesia se integra dentro de un Monasterio, que a su vez fue Palacio Real para los Reyes Católicos. La iglesia presenta una planta de cruz latina con cinco tramos coronada por una bóveda estrellada. A mitad de la fachada se sitúa un gran rosetón que da luz al coro y la iglesia.

La nave principal tiene unas medidas de 53 metros de largo por 10,50 de ancho y el crucero mide 28,80 metros de largo por 10,30 de ancho.
Interior de la Iglesia del Real Monasterio de Santo Tomás
El complejo monástico presenta tres patios; el claustro asociado a la Iglesia tiene unas medidas de 19,40 por 20,90 metros con dos plantas. Consta de 18 arcos, con dos puertas de acceso en su parte interior, y de 38 arcos polilobulados en su parte superior.
El retablo mayor contiene pinturas de Pedro Berruguete, (1450-1503) que ilustra 19 pinturas colocadas en esta magnífica obra de estilo gótico de 21 metros de alto.

Tumba del Príncipe Juan, hijo de los Reyes Católicos en el Monasterio de Santo Tomás
En lugar preferente junto al altar mayor, se halla el sepulcro o sarcófago del príncipe Juan, el único hijo varón de los Reyes Católicos, que murió prematuramente antes de llegar al trono.
La obra escultórica renacentista, en mármol de Carrara, es del autor italiano Domenico Fancelli. (1469-1519).
La entrada tiene un coste de 4 Euros (audioguía incluida) y su horario de
visita es de 10:00 a 14:30 y de 15:30 a 19:30. Mas información en este
artículo sobre el monasterio de Santo Tomás.
12. Estatua de Santa Teresa y Puerta del Alcazar
Desde la plaza de Santa Teresa de Jesús o mercado Grande, como se conoce
localmente, se haya la estatua principal de Santa Teresa de Jesús, patrona
de Ávila con San Segundo.
Estatua de Santa Teresa
Al lado izquierdo de esta se haya una de las entradas de la muralla, la
llamada puerta del Alcazar. Muy concurrida al conectar con una de las calles
comerciales de la ciudad así como uno de los accesos a lo alto de la
muralla.
La ciudad de Ávila cuenta con dos plazas de mercados.
La ciudad de Ávila cuenta con dos plazas de mercados.
13. Plaza del Mercado Chico
La plaza del mercado Chico es el principal punto neurálgico dentro de la
muralla y sede del ayuntamiento de la ciudad.
En ella se montan los principales puestos de ferias como la del mercado medieval así como una pequeña pista de hielo en invierno
Y la otra, conocida como el Mercado Chico, es la situada intramuros, en el corazón de la vieja ciudad, que es la verdadera Plaza Mayor de Ávila; una plaza que se ubica entre la Iglesia de San Juan y el Ayuntamiento.
Tiene forma rectangular, con un largo de 100 metros y 50 m de ancho. Al norte presenta un pórtico cuyas trazas son de Ángel Cossín de 1867, al oeste la muralla abulense, al este la iglesia de San Pedro y al sur varios edificios, entre los que está la iglesia románica de Santa Magdalena, parcialmente oculta por un edificio diseñado por Rafael Moneo.
Sobre esta Puerta hay un tímpano postizo con el blasón de los Reyes Católicos, flanqueado con el yugo y las flechas, y bajo el mismo, añadidos a posteriori, armas de sus descendientes y una inscripción del siglo XVI.
En la plaza, próximo a San Pedro, se ubica «El Monumento de las
Grandezas de Ávila», de Carlos Palao de 1882, de
estilo neoclásico, monumento dedicado a la santa que le da nombre a
la plaza.
En ella se montan los principales puestos de ferias como la del mercado medieval así como una pequeña pista de hielo en invierno
La plaza del Mercado Chico, lugar en el que se emplazaba el antiguo foro
romano, es el centro de la ciudad.
A ella dan las fachadas del Ayuntamiento y de la iglesia de San Juan,
reconstruida en los siglos XV-XVI.A lo largo de su historia, Ávila fue
cuna de famosos místicos españoles, como Santa Teresa de Jesús o San Juan
de la Cruz.
14. Plaza del mercado Grande o de Santa Teresa

Plaza de Santa Teresa o del Mercado Grande, con la obra de Moneo a la
derecha
Una es la que se conoce con el nombre de el Grande, situado extramuros,
es la actual Plaza de Santa Teresa, el espacio comprendido entre
la Iglesia de San Pedro y la Puerta del Alcázar.
Y la otra, conocida como el Mercado Chico, es la situada intramuros, en el corazón de la vieja ciudad, que es la verdadera Plaza Mayor de Ávila; una plaza que se ubica entre la Iglesia de San Juan y el Ayuntamiento.
Tiene forma rectangular, con un largo de 100 metros y 50 m de ancho. Al norte presenta un pórtico cuyas trazas son de Ángel Cossín de 1867, al oeste la muralla abulense, al este la iglesia de San Pedro y al sur varios edificios, entre los que está la iglesia románica de Santa Magdalena, parcialmente oculta por un edificio diseñado por Rafael Moneo.
Por el lado sur presenta un pretil ovalado en sillería de granito y
adornado con leones —a imitación de los de la iglesia de San Pedro—, que
actúan de separación entre acerado y calzada.
Se crea entre 1080 y 1100 con el nombre de «plaza
del Conde don Ramón», siendo durante la Edad Media el Mercado
Grande en donde se celebraban torneos, ejecuciones, promulgación de
leyes, recepciones reales y grandes mercados.
En el siglo XVI, junto a la Puerta del Alcázar se construyó a
iniciativa de fray Francisco Ruiz lo que en principio fue el edificio de
la alhóndiga del pan, en el que se almacenaba grano, y
que después tendría diversos usos,
como ayuntamiento y prisión (en ella estuvo
preso Diego de Bracamonte), ahora desaparecido.
Sobre esta Puerta hay un tímpano postizo con el blasón de los Reyes Católicos, flanqueado con el yugo y las flechas, y bajo el mismo, añadidos a posteriori, armas de sus descendientes y una inscripción del siglo XVI.
Desde 1860 a 1925 se le denominó «plaza del
Alcázar», pero dicho año se rebautizaría al actual nombre con motivo de
la coronación de la imagen de Santa Teresa de Jesús.
Monumento a Santa Teresa.
Obra de Emilio González, existió un quiosco de música
de 1920 a 1965, fecha en que se trasladó a otra
ubicación, al remodelarse la plaza con motivo de la construcción en el
subsuelo de la misma de un aparcamiento; igualmente se movió el
monumento de las grandezas, pero éste se devolvió a su lugar
en 1985.
En 1964 re rectifica el atrio de San Pedro,
habiéndoseles adquirido a finales del XIX 800 m², para
mejorar la salida de la plaza.
En 1973 se coloca junto a la Puerta del Alcázar un grupo
escultórico de cemento; al lado del cual se añadió una imagen de
Santa Teresa en caliza en 1982, con ocasión de la visita
del papa Juan Pablo II a la ciudad.
Centro neurálgico de la ciudad, aloja bajo los soportales de su fachada
porticada antiguos comercios y bares.
Es la gran plaza de Ávila marcada desgraciadamente por el horror
que diseñó Rafael Moneo. Un edificio feo, tosco, que rompe con el
entorno y que para colmo tiene un Burger King en sus bajos. No hay
derecho.
Enfrente, el contraste. Coquetos bloques de tres plantas con
soportales adintelados en los que aparecen tiendas más clásicas y
pequeños bares. Ejemplo de cómo se tienen que hacer las cosas en
una plaza histórica, por mucho que algunos quieran adaptarla a los
nuevos tiempos.
Enfrente, el contraste. Coquetos bloques de tres plantas con soportales adintelados en los que aparecen tiendas más clásicas y pequeños bares. Ejemplo de cómo se tienen que hacer las cosas en una plaza histórica, por mucho que algunos quieran adaptarla a los nuevos tiempos.
15. Basílica de San Vicente
La visitemos de día como de noche, la basílica de San Vicente es una de las
iglesias mas bonitas de la ciudad a mi parecer. Con casi 900 años de
antigüedad se alza muy cerca de la puerta de San Vicente, otra de las
entradas principales de la muralla de Ávila.
Otra edificación importante es la basílica de San Vicente, levantada en el siglo XII junto al lugar en que fueron martirizados tres santos en época de Diocleciano.
Este templo está considerado el más bello ejemplo románico de la ciudad, si bien posee otros elementos arquitectónicos que fueron añadidos con posterioridad.
El exterior del edificio se encuentra presidido por tres magníficos ábsides, la portada occidental, conocida también como el Pórtico de la Gloria de Ávila, y la fachada sur.
Mientras, en el interior sobresalen las bóvedas y se puede admirar el sepulcro de los tres mártires, un importante monumento funerario protogótico atribuido al maestro Fruchel.
Otra edificación importante es la basílica de San Vicente, levantada en el siglo XII junto al lugar en que fueron martirizados tres santos en época de Diocleciano.
Este templo está considerado el más bello ejemplo románico de la ciudad, si bien posee otros elementos arquitectónicos que fueron añadidos con posterioridad.
El exterior del edificio se encuentra presidido por tres magníficos ábsides, la portada occidental, conocida también como el Pórtico de la Gloria de Ávila, y la fachada sur.
Mientras, en el interior sobresalen las bóvedas y se puede admirar el sepulcro de los tres mártires, un importante monumento funerario protogótico atribuido al maestro Fruchel.
La Basílica de los Santos Hermanos Mártires, Vicente, Sabina y Cristeta
Más conocida como Basílica de San Vicente. Su construcción se inició en el siglo XII y finalizó en el siglo XIV.
Este templo románico abulense es el de mayor tamaño e importancia de la ciudad después de la Catedral y una de las obras más destacadas de este estilo arquitectónico de toda España. Desde 1882, es Monumento Nacional.Fachada de la basílica de San Vicente de Ávila – Destino Castilla y León
La fase final de esta construcción está atribuida al maestro francés Giral Fruchel, introductor del gótico en España y que participó también en la construcción de la catedral y en la Iglesia de la Magdalena de Zamora. Estructuralmente, es similar a las basílicas latinas, con una planta de cruz latina, tres naves de seis tramos, cimborrio, tribunas, tres ábsides, atrio, dos torres y una cripta.
El material utilizado para la construcción fue la piedra caleña, una arenisca de tonos amarillentos y anaranjados, proveniente de las canteras del cercano pueblo de La Colilla (Ávila).
Historia de estos santos
Está dedicada a los Santos hermanos mártires Vicente, Sabina y Cristeta, que en el año 306, durante la persecución de Diocleciano, la última y quizá más sangrienta persecución a los cristianos en el Imperio romano sufrieron martirio por negarse a firmar un documento en el que debían reconocer haber ofrecido sacrificios a los dioses romanos.
Sus cuerpos fueron depositados en una cavidad de una roca, sobre la que se edificó posteriormente la actual basílica. Esta supuesta roca puede contemplarse en la capilla derecha de la cripta.
Santos hermanos mártires Vicente, Sabina y Cristeta
En 1062, el rey Fernando I de León y Castilla ordenó que los restos fueran trasladados al monasterio de San Pedro de Arlanza (Burgos) , aunque en 1175, los cuerpos regresaron a su lugar de enterramiento original, que para aquel momento ya se había iniciado la construcción del actual templo, que fue entorno al año 1130.

Interior de San Vicente
El cenotafio de los santos Vicente, Sabina y Cristeta, es un gran monumento funerario con estructura arquitectónica y escultórica, de la segunda mitad del siglo XII y con un baldaquino añadido durante el siglo XV.
Es uno de los cenotafios románicos mejor conservados se encuentra situado en el crucero, bajo el arco toral del lado de la Epístola.Cenotafio de los santos Vicente, Sabina y Cristeta

En la Basílica de San Vicente se conserva la huella de una herradura de su caballo en las inmediaciones del altar.
Interior de la Basílica de San Vicente
Otra curiosidad es que el cubo de la muralla que forma el vértice dirigido hacia esta iglesia, recibe el nombre de Cubo de la Mula, debido a que allí se localiza un verraco celtibérico que dirige su cara, hacia el templo.
Convento de San José
Situado un poco alejado del centro en una zona con poco turismo nos
encontraremos con el Convento de San José. Mucha gente da con el al pasear
por la calle Duque de Alba, una de la arterias comerciales de la ciudad.
En su interior tenemos un museo.
Primera fundación llevada a cabo por Santa Teresa de Jesús, gracias al
apoyo del obispo Álvaro de Mendoza.
Fue edificado en 1562, aunque su iglesia, el elemento arquitectónico de
mayor interés, comenzó a construirse en 1607 con el diseño del arquitecto
renacentista Francisco de Mora, compañero de Juan de Herrera en otras
construcciones monumentales, como El Escorial, o la reconstrucción del
Alcázar de Segovia; fue el autor del complejo palaciego de Lerma.
Este templo fue concebido con una única nave, con cubierta de bóveda vaída y cúpula en el crucero.
Este templo fue concebido con una única nave, con cubierta de bóveda vaída y cúpula en el crucero.
unto con el convento de monjas carmelitas descalzas, es Monumento Nacional
desde 1968. Actualmente el edificio sirve de sede al Museo Teresiano de
las Carmelitas Descalzas.
16. Ermita de la Virgen de Sonsoles
Tradicionalmente los que vivimos en Ávila subimos de vez en cuando hasta
esta ermita situada en lo alto de una colina en la zona sur de Ávila. Es
conocida por guardar un cocodrilo en una vitrina de cristal de la época del
descubrimiento de América.

A cinco kilómetros del centro de Ávila en dirección Toledo se levanta
un remanso de paz dedicado a Nuestra Señora de Sonsoles. Allí la
Virgen se hace fuerte, alejada de la ciudad y de su “competidora”
—permítanme la expresión—, Santa Teresa de Jesús.
Porque la Santa copa con orgullo la ciudad amurallada, pero Sonsoles
puede presumir de ser la patrona de Ávila desde su “destierro” en una
colina del Valle Amblés. Su lejanía no impide que cada domingo decenas
de fieles acudan a las misas que se celebran en la ermita. Y, por
supuesto, el primer domingo de julio los abulenses la arropan y miman
con motivo de su fiesta grande
Dentro del templo, Nuestra Señora de Sonsoles está bien protegida
por un cocodrilo. Como lo oyen. Todo tiene su
explicación.
Dicen que un caballero abulense que se encontraba en la recién
descubierta América fue atacado por un cocodrilo.
Cuando nada hacía presagiar que salvaría la vida, el hombre se
encomendó a la Virgen de Sonsoles.
De repente, la fusta que llevaba colgada de su cintura se convirtió
en espada para acabar con la vida de la «fiera». Como agradecimiento
a la Virgen, trasladó el cuerpo del reptil hasta su santuario y allí
reposa disecado en una urna.
El cocodrilo del santuario de Nuestra Señora de Sonsoles
Fuera del templo, tenemos los ingredientes típicos de cualquier
santuario con devoción. Zonas verdes, merenderos, restaurante,
juegos infantiles, gran aparcamiento… y como complemento unas
sensacionales vistas de los campos de cultivo con Ávila al
fondo.
Por cierto en el restaurante que hay en Sonsoles hacen una pizza muy rica y
unas palomitas de ensaladilla deliciosas.Porque la Santa copa con orgullo la ciudad amurallada, pero Sonsoles puede presumir de ser la patrona de Ávila desde su “destierro” en una colina del Valle Amblés. Su lejanía no impide que cada domingo decenas de fieles acudan a las misas que se celebran en la ermita. Y, por supuesto, el primer domingo de julio los abulenses la arropan y miman con motivo de su fiesta grande
Dentro del templo, Nuestra Señora de Sonsoles está bien protegida
por un cocodrilo. Como lo oyen. Todo tiene su
explicación.
Dicen que un caballero abulense que se encontraba en la recién
descubierta América fue atacado por un cocodrilo.
Cuando nada hacía presagiar que salvaría la vida, el hombre se
encomendó a la Virgen de Sonsoles.
De repente, la fusta que llevaba colgada de su cintura se convirtió
en espada para acabar con la vida de la «fiera». Como agradecimiento
a la Virgen, trasladó el cuerpo del reptil hasta su santuario y allí
reposa disecado en una urna.
El cocodrilo del santuario de Nuestra Señora de Sonsoles
Fuera del templo, tenemos los ingredientes típicos de cualquier
santuario con devoción. Zonas verdes, merenderos, restaurante,
juegos infantiles, gran aparcamiento… y como complemento unas
sensacionales vistas de los campos de cultivo con Ávila al
fondo.
17. Capilla de Mosén Rubí
Cerca de una de las entradas a la muralla desde la zona Norte se haya la
capilla de Mosén Rubí. Para llegar a ella basta con salir desde la plaza del
mercado chico por la plaza de Zurraquín todo recto y al cabo de un par de
minutos llegaremos a la capilla.

18. Iglesia de San Pedro
Ubicada en la plaza de Santa Teresa de Jesús o mercado Grande y justo al
otro extremo de la puerta del Alcazar se haya la iglesia de San Pedro.
Inconfundible por el gran rosetón encima de su puerta principal.
Iglesia de San Pedro

19. Convento del Carmen
Pegado a la muralla y sobre la puerta del Carmen su actual cometido es
salvaguardar el archivo histórico provincial. Actualmente con la visita a la
muralla podemos pasar por debajo de su característica espadaña.
20. Santo Tomé el Viejo
Antigua iglesia reconvertida en museo y almacén del museo Provincial. Suele
ser un lugar de paso de camino a la catedral.
El coste de la entrada es de 1.20 Euros.
Detrás de la basílica se encuentra la iglesia de San Andrés, de época
románica y que guarda en su interior los capiteles historiados más
importantes de cuantos se conservan en la capital.
La también románica iglesia de San Pedro, que data de los siglos XII-XIII, es una de las más antiguas de la ciudad. La sobriedad que caracteriza a esta construcción atrajo desde hace siglos a los personajes más relevantes de la sociedad abulense.
Fuera del recinto amurallado, se encuentra el Monasterio de la Encarnación, erigido en el siglo XVI y donde Santa Teresa vivió como religiosa
durante más de 20 años. En él merece la pena detenerse en los lugares
frecuentados por la escritora, como su celda o la capilla de la
Transverberación.
21. Monasterio de la Encarnación
Al norte de la ciudad y a cierta distancia se encuentra el monasterio
de la Encarnación. Es clave en la vida de Santa Teresa donde residió
casi 40 años.
La también románica iglesia de San Pedro, que data de los siglos XII-XIII, es una de las más antiguas de la ciudad. La sobriedad que caracteriza a esta construcción atrajo desde hace siglos a los personajes más relevantes de la sociedad abulense.
Un gran rosetón cisterciense en su portada y los tres ábsides que posee
son sus elementos más destacados en el exterior.
Dentro, la escasa ornamentación contrasta con el interesante conjunto
de pinturas y retablos que posee.Fuera de las murallas, aunque muy
próximo a la puerta de Los Leales, se sitúa el palacio de los
Deanes.
Originariamente, tal y como su propio nombre indica, esta monumental
casa del siglo XVI fue construida para albergar a los sucesivos deanes
(clérigos responsables de la administración del cabildo catedralicio)
que tuvo Ávila a lo largo de su historia.
Lo primero que llama la atención es su fachada renacentista, que presenta doble hilera de columnas, está decorada con escudos de estilo plateresco y coronada por pináculos barrocos. Estos elementos transmiten al conjunto un innegable aspecto señorial.
Lo primero que llama la atención es su fachada renacentista, que presenta doble hilera de columnas, está decorada con escudos de estilo plateresco y coronada por pináculos barrocos. Estos elementos transmiten al conjunto un innegable aspecto señorial.
En el interior, un edificio principal y varias dependencias se
estructuran alrededor de un patio de dos galerías con arquerías góticas.
Estas instalaciones albergan en la actualidad el Museo Provincial, que
contiene interesantes secciones de arqueología, etnografía y bellas
artes.
El museo cuenta, además, con un edificio anejo, la antigua iglesia de Santo Tomé el Viejo (siglo XII).Tradicional residencia estival de los monarcas españoles, el monasterio de Santo Tomásfue concluido en 1493 en estilo gótico isabelino durante el reinado de los Reyes Católicos.
El museo cuenta, además, con un edificio anejo, la antigua iglesia de Santo Tomé el Viejo (siglo XII).Tradicional residencia estival de los monarcas españoles, el monasterio de Santo Tomásfue concluido en 1493 en estilo gótico isabelino durante el reinado de los Reyes Católicos.
El conjunto se encuentra presidido por una monumental iglesia de
una sola nave cubierta por bóvedas de crucería y varias capillas
laterales. En el centro del crucero se encuentra el bello sepulcro del
Infante don Juan, hijo de los Reyes, esculpido en mármol por Domenico
Fancelli.
Destaca, asimismo, un magnífico retablo realizado por Berruguete y el coro elevado. La zona conventual se ordena en torno a tres claustros –del Noviciado, del Silencio y de los Reyes- con rica ornamentación.
Destaca, asimismo, un magnífico retablo realizado por Berruguete y el coro elevado. La zona conventual se ordena en torno a tres claustros –del Noviciado, del Silencio y de los Reyes- con rica ornamentación.
Mientras, las antiguas dependencias reales acogen el Museo
Oriental, que exhibe una interesante colección de obras procedentes del
Extremo Oriente
.La visita a esta ciudad milenaria puede finalizar en el mirador de los
Cuatro Postes, desde el que se contempla una de las más bellas estampas
del conjunto medieval amurallado.Gastronomía y alrededores
En cualquiera de los restaurantes de la capital abulense es posible
descubrir la excelente gastronomía de la zona. Sobresalen los excelentes
asados de cochinillo y cordero, además del famoso chuletón de ternera de
Ávila.
Tanto la carne de ternera avileña como las judías de El Barco de Ávila poseen Denominación de Origen propia. Gran parte de la fama de la repostería abulense se debe a las yemas de Santa Teresa (a base de huevo y azúcar).
Tanto la carne de ternera avileña como las judías de El Barco de Ávila poseen Denominación de Origen propia. Gran parte de la fama de la repostería abulense se debe a las yemas de Santa Teresa (a base de huevo y azúcar).
22. Iglesia de Santiago
La iglesia de Santiago se sitúa al lado sur de la ciudad, bajo el paseo
del Rastro. Es una de las más atractivas desde nuestro punto de vista. Su
construcción original data del siglo XIII, en estilo románico, con
transiciones al gótico, aunque se la considera más gótico tardío ya que
fue finalizada en el siglo XVI en la mayoría de los detalles.
El elemento más característico de esta iglesia de una única nave es un
torre campanario, octogonal y con la base en piedra granítica, para luego
usar la piedra arenística de la zona, para finalizar de nuevo en piedra
granítica y una cubierta de terraza.

Iglesia de Santiago de Ávila
En su interior se encuentra un retablo que constituye un notable ejemplo
de la presencia de los elementos típicamente jacobeos, presentes en los
templos situados en el Camino de Santiago, y es que uno de los ramales de
los caminos de Madrid, atraviesa la ciudad de Ávila.
Fue declarada Patrimonio de la Humanidad, junto con las otras iglesias de
Ávila y es Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento desde
1983.
Sobre la tapa se leía la inscripción Santus Secundus, que dio
lugar a que durante mucho tiempo se creyera que Ávila había sido fundada
por este santo; uno de los siete varones apostólicos enviados por San
Pedro a evangelizar la península Ibérica.
Se trata de uno de los templos más antiguos de la ciudad, construido
con piedra arenisca. Durante el siglo XX sufrió ciertas
restauraciones.
Interior de la Iglesia de San Andrés de Ávila
Cuenta con una planta basilical de tres naves, con sus correspondientes ábsides, siendo mayor el central.
23. Ermita de San Segundo
Esta ermita está al oeste de la ciudad de Ávila, fuera del recinto
amurallado y en la margen derecha del río Adaja. Posee una planta con
tres naves y cabecera tripartita desviada. Conserva vestigios románicos,
aunque fue ampliamente reformada durante el siglo XVI.
En su interior se guarda una escultura de alabastro elaborada por el
artista Juan de Juni. (1506-1577) formado en Francia y en Italia, y
miembro de la escuela de la escultura castellana.
Durante las reformas efectuadas en 1521, en uno de sus muros se encontró
un sepulcro con una caja que contenía huesos de un cuerpo humano.

Este suceso fue la causa del cambio de nombre de la iglesia que
pasó a llamarse Ermita de San Segundo.
Cuenta la creencia popular que introduciendo un pañuelo en el sepulcro y
pidiendo tres deseos, el santo concede uno de ellos.
Interior de la Ermita de San Segundo de Ávila
San Segundo es el patrón de Ávila y su romería se celebra el 2 de mayo.
Esta sencilla y humilde ermita fue declarada Monumento
arquitectónico-artístico por Real Orden en 1923.
24. Iglesia de San Andrés
Esta Iglesia románica del siglo XII se sitúa al noreste de la ciudad,
a extramuros y en el barrio conocido como “el de los canteros”, porque
allí residían los maestros de obras y canteros que trabajaron en la
fortificación de Ávila.
Esta otra iglesia románica data del siglo XII, se sitúa al sur de la
ciudad. Esta iglesia estaba consagrada a San Nicolás por el obispo
Jacobo de Ávila en 1198. Al levantarse esta iglesia, empezaron la
construcción por la cabecera, mientras que la fachada occidental sería
ya finalizada a comienzos del siglo XIII.
Presenta tres naves, con tres puertas de acceso, y un ábside
semicircular. Cuenta además con una torre de planta cuadrangular. El
material empleado en su construcción, es el ya tradicional en las
otras iglesias románicas de Ávila, piedra de sillería lisa arenisca,
sobre zócalo de granito. Fue reformada en el siglo XVII.
Para llegar hasta ella, hay que cruzar la carretera que circunvala la
muralla de Ávila a la altura del muro norte de la basílica de San
Vicente, para luego entrar o por la calle Parrilla o la calle Valseca,
ya que ambas desembocan en la Plaza de San Andrés, donde se ubica el
templo.

Interior de la Iglesia de San Andrés de Ávila
Cuenta con una planta basilical de tres naves, con sus correspondientes ábsides, siendo mayor el central.
Fue declarada Monumento Nacional el 23 de junio de 1923 y en 1985
pasaría a tener automáticamente la categoría de Bien de Interés Cultural
además de junto con el casco antiguo de Ávila y otras iglesias
extramuros el reconocimiento de Patrimonio de la Humanidad por parte de
la Unesco.
25. Iglesia de San Nicolás
Hacia el 1303 el barrio creció y se hizo bastante popular,
concentrándose en él parte de los inmuebles arrendados del cabildo. A
inicios del siglo XX este templo fue parcialmente restaurado. Fue
declarada Monumento Nacional el 22 de febrero de 1980.
26. De Tapas en Avila
Sigue leyendo porque aquí encontrarás cinco lugares en los que tendrás
que entrar si quieres degustar lo mejor en tapas de la ciudad de
Ávila.

Alavirulé
Situado en una de las calle más concurridas (San Segundo, 40), se
trata de un restaurante con un diseño y estilo vintage muy cuidado.
Además, ofrece un ambiente moderno que lo diferencia de los más
clásicos de la zona gracias a sus jóvenes propietarios.
En su barra podrás elegir diferentes y originales pinchos como bocatines
de pollo confitado, cazuelita de huevos rotos o pinchos morunos.
Todo por menos de 4 euros.
Restaurante "La Bruja"
En pleno casco histórico de la ciudad (Francisco Gallego, 3)
encontrarás una casa palacio de finales del siglo XVI.
Ganador del concurso Maridajes de Castilla y León y del "Ávila en
tapas de 2013", sus tapas destacan por su creatividad, como el
trigretón de morcilla crujiente con salsa de puerros o la empanada
argentina de carne picada, pimentón y tosta de huevo duro.
El Buen Yantar
Cruzando la Puerta del Rastro, encontraras a pocos pasos la Plaza del
Mercado Chico, la otra zona de tapas por excelencia.
Especializado en croquetas, el Buen Yantar (Vallespín, 1) tiene una
terraza situada en la propia plaza.
Como es un sitio pequeño, siempre está hasta arriba, pero son muy
amables.
La Bodeguita
De vuelta a la animada calle San Segundo, esta vez deberás hacer una
parada en su número 19.

A los pies de la muralla y al lado de la catedral encontrarás esta oda
al vino. Junto a sus más de 1.300 referencias, podrás elegir alguno de
sus aperitivos y tapas deluxe.
Prueba las virutillas de foie, el bacalao ahumado con Philadelphia y
reducción de Pedro Ximénez o la tosta de perdiz escabechada.
Rincón del Jabugo
Continua por esta calle, hasta encontrarte esta vez con otra dirección
imprescindible, en número
Por su nombre ya puedes imaginar lo que se sirve, y es, entre otras
muchas cosas, jamón de jabugo de Extremadura Guijuelo.
Pero esto no es todo, tienes una oferta para degustar sus tostad con
gin-tonic, el llamado 'Gin and Toast'.
27. Museos de Ávila
Y Por último, si disponéis de algo más de tiempo podéis dedicar unas horas para visitar alguno los museos de la ciudad:
Museo de Ávila
Museo Monasterio de la Encarnación
Torreón de los Guzmanes
Museo Teresiano de las Carmelitas Descalzas
Museo de Santa Teresa
Archivo Histórico Provincial
Museo Catedralicio
Centro de Interpretación de la Mística
Museo de Arte Oriental y de Ciencias Naturales
Museo de Intendencia
28. Ferias y Fiestas
Mercado Medieval, Avila
Las fiestas
patronales
de Ávila son las de Santa Teresa de Jesús, el 15 de octubre,
y San Segundo, el 2 de mayo.
Las fiestas de
verano
de la ciudad tienen lugar durante la segunda quincena de
julio.También es patrona de Ávila la virgen de Sonsoles.
La Semana Santa
en Ávila es considerada como de Interés Turístico Regional
desde el año 1993 y como de Interés Turístico Nacional desde
el año 2005. Desde 2014 hasta la actualidad es considerada
como de Interés Turístico Internacional.
Ferias y certámenes
Mercado medieval:
Durante el fin de semana posterior al primer viernes de
septiembre de cada año tiene lugar un mercado medieval en el
casco histórico de la ciudad. Se puede disfrutar de una
ambientación, espectáculos y gastronomía propias del
medievo.
Festival de Teatro de Calle y Artes Circenses.
Tiene lugar en temporada veraniega y se llevan a cabo
distintos espectáculos callejeros, de índole gratuita.
Arteávila.
Se trata de un certamen anual de artesanía. Tiene lugar
durante el mes de agosto en el paseo del Rastro y es
organizado por la Asociación de Artesanías Varias de Ávila
(ADAVA)
29. ¿Qué y donde comer en Ávila?
Como buena ciudad castellana, la gastronomía es uno de los puntos fuertes de Ávila. A pesar de que estuvimos poco en la ciudad pudimos probar algunos de sus platos más destacados como el chuletón de ternera, las patatas revolconas o la morcilla.
Tampoco os podéis perder las conocidas yemas de Santa Teresa de Ávila. Dentro del recinto amurallado encontraréis numerosas tiendas donde venden estos exquisitos dulces.
Como veis, Ávila aúna una mezcla perfecta entre patrimonio, cultura y gastronomía lo que la convierte en un destino ideal para una escapada de fin de semana.
Restaurante Bococo
Calle Estrada 11,
05001 Ávila, España
+34 920 22 36 46
Los Candiles
Calle Pedro Lagasca, 5,
05001 Ávila, España
+34 920 21 31 02
Siglodoce
Plaza Catedral 6,
05001 Ávila, España
+34 920 25 28 85
Gloria Bendita
Bajada de la Losa 2,
05002 Ávila, España
+34 920 23 80 50
El Tostado
Plaza Catedral 10,
05001 Ávila, España
+34 920 25 51 00
y algo mas económicos
Restaurante SanjuaniegoCalle Río adaja, 2,05004 Ávila España+34 920 22 20 09
Mesón GredosCalle Comuneros de Castilla 4.05001 Ávila España+34 920 21 17 58
Cafeteria Cerveceria PradosSargento Provisional 5, 05003 Ávila España+34 920 25 29 08
28. Ferias y Fiestas
Las fiestas
patronales
de Ávila son las de Santa Teresa de Jesús, el 15 de octubre,
y San Segundo, el 2 de mayo.
La Semana Santa
en Ávila es considerada como de Interés Turístico Regional
desde el año 1993 y como de Interés Turístico Nacional desde
el año 2005. Desde 2014 hasta la actualidad es considerada
como de Interés Turístico Internacional.
Ferias y certámenes
Mercado medieval:
Durante el fin de semana posterior al primer viernes de
septiembre de cada año tiene lugar un mercado medieval en el
casco histórico de la ciudad. Se puede disfrutar de una
ambientación, espectáculos y gastronomía propias del
medievo.
Festival de Teatro de Calle y Artes Circenses.
Tiene lugar en temporada veraniega y se llevan a cabo
distintos espectáculos callejeros, de índole gratuita.
Arteávila.
Se trata de un certamen anual de artesanía. Tiene lugar
durante el mes de agosto en el paseo del Rastro y es
organizado por la Asociación de Artesanías Varias de Ávila
(ADAVA)
29. ¿Qué y donde comer en Ávila?
Como buena ciudad castellana, la gastronomía es uno de los puntos fuertes de Ávila. A pesar de que estuvimos poco en la ciudad pudimos probar algunos de sus platos más destacados como el chuletón de ternera, las patatas revolconas o la morcilla.

Tampoco os podéis perder las conocidas yemas de Santa Teresa de Ávila. Dentro del recinto amurallado encontraréis numerosas tiendas donde venden estos exquisitos dulces.

Como veis, Ávila aúna una mezcla perfecta entre patrimonio, cultura y gastronomía lo que la convierte en un destino ideal para una escapada de fin de semana.
Restaurante Bococo
Calle Estrada 11,
05001 Ávila, España
+34 920 22 36 46
Los Candiles
Calle Pedro Lagasca, 5,
05001 Ávila, España
+34 920 21 31 02
Siglodoce
Plaza Catedral 6,
05001 Ávila, España
+34 920 25 28 85
Gloria Bendita
Bajada de la Losa 2,
05002 Ávila, España
+34 920 23 80 50
El Tostado
Plaza Catedral 10,
05001 Ávila, España
+34 920 25 51 00
30. Jornadas Medievales, la gran fiesta de Ávila
No se nos ocurre mejor ciudad que Ávila para hacer un viaje
en el tiempo al Medievo con mercaderes, teatro, juglares,
titiriteros, torneos, arqueros… Cada primer fin de semana de
septiembre acoge las Jornadas Medievales, una cita que viste a
Ávila y a los abulenses como en la Edad Media.
Desfile durante las Jornadas Medievales
Torneo medieval junto a la Muralla
En 2017 tuvimos la oportunidad de visitar este espectáculo
para los sentidos que se concentra en el entorno de las plazas
del Mercado Chico y de la Catedral. Mención aparte merecen los
torneos medievales a caballo que tienen lugar en el atrio de
San Isidro.
La ciudad se dividió en los barrios árabe, judío y
cristiano para ofrecer una explosión de colores, aromas y
sensaciones que nos encandilaron.
31. Otras Rutas Cercanas

Desfile durante las Jornadas Medievales

La ciudad se dividió en los barrios árabe, judío y cristiano para ofrecer una explosión de colores, aromas y sensaciones que nos encandilaron.
Escapada al Valle de Iruelas, Avila
Escapada al Valle de Ambroz, Cáceres

Ruta Sefardi por Caceres

Viaje a la Leyenda: Las Hurdes, Caceres

No hay comentarios:
Publicar un comentario